Comer sano hoy es tendencia y no parece que vaya a ser una moda pasajera. Cada vez más consumidores procuran mantener una alimentación saludable más allá de las famosas cinco piezas de fruta y verdura al día. Y cada vez estamos más concienciados de la necesidad de eliminar de nuestra dieta el exceso de azúcares, grasas saturadas y alimentos ultraprocesados y de apostar por una forma de comer más natural, eligiendo productos cultivados en proximidad e incluso aquellos que evitan los envases más contaminantes.
El sistema alimentario es fundamental para el planeta, no solo porque tiene que cubrir una necesidad básica esencial de todo ser humano, sino también porque está directamente relacionado con la salud, la protección del medio ambiente o el desarrollo de las economías locales.
Por este motivo, la FAO pretende concienciar en la edición de este año del Día Mundial de la Alimentación, que se celebra este sábado 16 de octubre, de la importancia de contar con un sistema alimentario sostenible, alineado con los grandes retos globales de la Agenda 2030 y que garantice una dieta saludable al alcance de todas las personas.
Para avanzar hacia ese modelo de alimentación, es necesario que los gobiernos obliguen a las compañías del sector a adoptar una serie de buenas prácticas orientadas al uso adecuado de la tierra y de los recursos hídricos; y concienciar a la sociedad de la importancia de elegir bien los productos a la hora de hacer la compra, de apoyar a los productores locales, de evitar el desperdicio de comida, de reciclar los residuos generados por los alimentos y de mantener una dieta saludable para prevenir enfermedades.
Además, también resulta muy importante apoyar el talento y el ingenio de las nuevas generaciones de emprendedores que consiguen un impacto positivo en el sistema de alimentación, en la sociedad y en el planeta. Afortunadamente, son muchas las nuevas empresas nacidas a partir de una idea para cambiar el mundo a través de lo que comemos o bebemos.
Café con valores
Una de ellas es Filantrópico, una empresa social que se ha propuesto convertir el consumo de café, una de las bebidas más consumidas del mundo, en un acto solidario y sostenible. Bajo el lema ‘Juntos dejamos poso’, la compañía ha creado su propia marca de café, que comercializa en bolsas de 60 cápsulas biodegradables compatibles con máquinas Nespresso, o de 1 Kg de café molido o en grano.
De cada paquete, todos ellos compostables, el 20% de su precio de venta se convierte en una donación directa que va destinada al proyecto social elegido por el consumidor entre una propuesta de proyectos de ONG y Entidades No Lucrativas.
Solo con que el 1% de los consumidores habituales de café eligieran esta marca, se podrían conseguir más de 10 millones de euros anuales para financiar proyectos sociales y se evitarían los residuos de 80 millones de cápsulas de aluminio y plástico no biodegradables y de 800.000 envases no reciclables.
Además, el café se importa desde sus países de origen en grano verde, y es aquí donde se tuesta y envasa, generando puestos de trabajo e impulsando las economías locales en nuestro territorio.
Alimentación natural sin aditivos
La filosofía de Natruly parte de la idea de cambiar el mundo cambiando lo que comemos: si prestamos más atención al origen y la producción de los alimentos, evolucionaremos hacia un consumo global más responsable. Y una alimentación más natural, sostenible y responsable llevará a la sociedad a un estilo de vida más saludable.
Para ello, la compañía dedica importantes esfuerzos en I+D para desarrollar productos naturales y honestos con uno mismo y con el planeta, sin aditivos, sin azúcares añadidos, sin gluten y sin edulcorantes artificiales: solo alimentos sanos, ricos en propiedades, procedentes de lo que la naturaleza nos ofrece.
Agua para cambiar el mundo
La FAO estima que unos 1.200 millones de personas de todo el mundo no disponen de acceso a agua potable, lo que condiciona su salud y su salubridad, su capacidad de cultivar sus alimentos y su desarrollo económico.
Para contribuir a mejorar la vida de estas personas, en 2016 nació la empresa social AUARA, que vende agua mineral embotellada y destina el 100% de sus dividendos a construir pozos, tanques de recogida de agua de lluvia y sistemas de saneamiento en estos territorios. La compañía ha generado ya 86 millones de litros de agua potable que abastecen a más de 60.600 personas de 17 países en vías de desarrollo.
Además, ha sido la primera empresa de bebidas española en fabricar todas sus botellas con plástico rPET 100% reciclado y reciclable, dando una segunda vida a residuos que ya existen en nuestro planeta y que tardarían miles de años en degradarse. Desde su nacimiento, ha reutilizado 16,7 millones de botellas de plástico, o lo que es lo mismo, 372.000 kilos de plástico, evitando el uso de 622.000 litros de petróleo y sus efectos contaminantes.
Una alimentación se considera sostenible cuando durante su producción se ha reducido el impacto medioambiental, no se agotan los recursos naturales y se respeta a la biodiversidad. Tener en cuenta qué alimentos se incluyen en la dieta repercute no solo en la salud de las personas sino también del planeta.
Respuesta:
Comer sano hoy es tendencia y no parece que vaya a ser una moda pasajera. Cada vez más consumidores procuran mantener una alimentación saludable más allá de las famosas cinco piezas de fruta y verdura al día. Y cada vez estamos más concienciados de la necesidad de eliminar de nuestra dieta el exceso de azúcares, grasas saturadas y alimentos ultraprocesados y de apostar por una forma de comer más natural, eligiendo productos cultivados en proximidad e incluso aquellos que evitan los envases más contaminantes.
El sistema alimentario es fundamental para el planeta, no solo porque tiene que cubrir una necesidad básica esencial de todo ser humano, sino también porque está directamente relacionado con la salud, la protección del medio ambiente o el desarrollo de las economías locales.
Por este motivo, la FAO pretende concienciar en la edición de este año del Día Mundial de la Alimentación, que se celebra este sábado 16 de octubre, de la importancia de contar con un sistema alimentario sostenible, alineado con los grandes retos globales de la Agenda 2030 y que garantice una dieta saludable al alcance de todas las personas.
Para avanzar hacia ese modelo de alimentación, es necesario que los gobiernos obliguen a las compañías del sector a adoptar una serie de buenas prácticas orientadas al uso adecuado de la tierra y de los recursos hídricos; y concienciar a la sociedad de la importancia de elegir bien los productos a la hora de hacer la compra, de apoyar a los productores locales, de evitar el desperdicio de comida, de reciclar los residuos generados por los alimentos y de mantener una dieta saludable para prevenir enfermedades.
Además, también resulta muy importante apoyar el talento y el ingenio de las nuevas generaciones de emprendedores que consiguen un impacto positivo en el sistema de alimentación, en la sociedad y en el planeta. Afortunadamente, son muchas las nuevas empresas nacidas a partir de una idea para cambiar el mundo a través de lo que comemos o bebemos.
Café con valores
Una de ellas es Filantrópico, una empresa social que se ha propuesto convertir el consumo de café, una de las bebidas más consumidas del mundo, en un acto solidario y sostenible. Bajo el lema ‘Juntos dejamos poso’, la compañía ha creado su propia marca de café, que comercializa en bolsas de 60 cápsulas biodegradables compatibles con máquinas Nespresso, o de 1 Kg de café molido o en grano.
De cada paquete, todos ellos compostables, el 20% de su precio de venta se convierte en una donación directa que va destinada al proyecto social elegido por el consumidor entre una propuesta de proyectos de ONG y Entidades No Lucrativas.
Solo con que el 1% de los consumidores habituales de café eligieran esta marca, se podrían conseguir más de 10 millones de euros anuales para financiar proyectos sociales y se evitarían los residuos de 80 millones de cápsulas de aluminio y plástico no biodegradables y de 800.000 envases no reciclables.
Además, el café se importa desde sus países de origen en grano verde, y es aquí donde se tuesta y envasa, generando puestos de trabajo e impulsando las economías locales en nuestro territorio.
Alimentación natural sin aditivos
La filosofía de Natruly parte de la idea de cambiar el mundo cambiando lo que comemos: si prestamos más atención al origen y la producción de los alimentos, evolucionaremos hacia un consumo global más responsable. Y una alimentación más natural, sostenible y responsable llevará a la sociedad a un estilo de vida más saludable.
Para ello, la compañía dedica importantes esfuerzos en I+D para desarrollar productos naturales y honestos con uno mismo y con el planeta, sin aditivos, sin azúcares añadidos, sin gluten y sin edulcorantes artificiales: solo alimentos sanos, ricos en propiedades, procedentes de lo que la naturaleza nos ofrece.
Agua para cambiar el mundo
La FAO estima que unos 1.200 millones de personas de todo el mundo no disponen de acceso a agua potable, lo que condiciona su salud y su salubridad, su capacidad de cultivar sus alimentos y su desarrollo económico.
Para contribuir a mejorar la vida de estas personas, en 2016 nació la empresa social AUARA, que vende agua mineral embotellada y destina el 100% de sus dividendos a construir pozos, tanques de recogida de agua de lluvia y sistemas de saneamiento en estos territorios. La compañía ha generado ya 86 millones de litros de agua potable que abastecen a más de 60.600 personas de 17 países en vías de desarrollo.
Además, ha sido la primera empresa de bebidas española en fabricar todas sus botellas con plástico rPET 100% reciclado y reciclable, dando una segunda vida a residuos que ya existen en nuestro planeta y que tardarían miles de años en degradarse. Desde su nacimiento, ha reutilizado 16,7 millones de botellas de plástico, o lo que es lo mismo, 372.000 kilos de plástico, evitando el uso de 622.000 litros de petróleo y sus efectos contaminantes.
Explicación paso a paso:
coronita pliz
espero que te ayude
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Respuesta:
Una alimentación se considera sostenible cuando durante su producción se ha reducido el impacto medioambiental, no se agotan los recursos naturales y se respeta a la biodiversidad. Tener en cuenta qué alimentos se incluyen en la dieta repercute no solo en la salud de las personas sino también del planeta.