Respuesta: En enero de 2009 se había cumplido ya un año y medio
desde la crisis que desencadenó la titularización de las
hipotecas de baja calidad en Estados Unidos. Además,
habían pasado cuatro meses desde la fatídica semana
que se inició el domingo 14 de septiembre de 2008
con la quiebra de Lehman Brothers, uno de los cinco
grandes bancos de inversión estadounidenses y el
rescate de otro de ellos, Merrill Lynch, que pasó a ser
una subsidiaria del Bank of America; Bear Stearns, que
había recibido ayuda en marzo, entró en proceso de
fusión con J.P. Morgan Chase. La semana continuó con
el rescate de la principal empresa de seguros, American
Insurance Group (aig), la venta forzosa de los activos
del principal banco de ahorro y crédito —Washington
Mutual— y de uno de los bancos comerciales más
grandes, Wachovia. Muchos otros de menor tamaño
habían venido quebrando y han seguido haciéndolo
desde entonces. Además, algunos bancos de inversión
aún independientes como Goldman Sachs y Morgan
Stanley —el grupo financiero japonés Mitsubishi ufj
adquiriría en octubre una quinta parte de la propiedad
del segundo ellos— se convirtieron en sociedades de
inversión (holdings) bancarias, pasando de esta manera
a la supervisión de la Reserva Federal. El miércoles 17
y el jueves 18 de septiembre el sistema financiero de los
Estados Unidos estuvo a punto de sufrir un colapso total
y se inició un período que vino a llamarse de “congelamiento” del crédito, que en su momento más crítico
implicó la paralización del crédito interbancario y de la
emisión de valores comerciales de corto plazo. Durante
esa semana se desencadenó también una secuencia de
quiebras de los bancos europeos, que todavía no se
detiene. Cabe señalar que algunos bancos británicos
habían enfrentado dificultades desde antes.
Como lo ha señalado el gran historiador económico
Charles Kindleberger (Kindleberger y Aliber, 2005), la
frecuencia de las crisis financieras es un hecho recurrente
en la historia del capitalismo. Además, desde los años
sesenta se ha acentuado el surgimiento de perturbaciones
financieras de distinto tipo, coincidiendo con diversos
procesos de liberalización económica mundial (Bordo
y otros, 2001). En el caso de los Estados Unidos, esta
es la tercera crisis bancaria de las últimas décadas. La
primera fue la crisis latinoamericana de la deuda, que
fue hábilmente manejada a fin de que América Latina
Explicación: espero y te ayude
" Life is not a problem to be solved but a reality to be experienced! "
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Respuesta: En enero de 2009 se había cumplido ya un año y medio
desde la crisis que desencadenó la titularización de las
hipotecas de baja calidad en Estados Unidos. Además,
habían pasado cuatro meses desde la fatídica semana
que se inició el domingo 14 de septiembre de 2008
con la quiebra de Lehman Brothers, uno de los cinco
grandes bancos de inversión estadounidenses y el
rescate de otro de ellos, Merrill Lynch, que pasó a ser
una subsidiaria del Bank of America; Bear Stearns, que
había recibido ayuda en marzo, entró en proceso de
fusión con J.P. Morgan Chase. La semana continuó con
el rescate de la principal empresa de seguros, American
Insurance Group (aig), la venta forzosa de los activos
del principal banco de ahorro y crédito —Washington
Mutual— y de uno de los bancos comerciales más
grandes, Wachovia. Muchos otros de menor tamaño
habían venido quebrando y han seguido haciéndolo
desde entonces. Además, algunos bancos de inversión
aún independientes como Goldman Sachs y Morgan
Stanley —el grupo financiero japonés Mitsubishi ufj
adquiriría en octubre una quinta parte de la propiedad
del segundo ellos— se convirtieron en sociedades de
inversión (holdings) bancarias, pasando de esta manera
a la supervisión de la Reserva Federal. El miércoles 17
y el jueves 18 de septiembre el sistema financiero de los
Estados Unidos estuvo a punto de sufrir un colapso total
y se inició un período que vino a llamarse de “congelamiento” del crédito, que en su momento más crítico
implicó la paralización del crédito interbancario y de la
emisión de valores comerciales de corto plazo. Durante
esa semana se desencadenó también una secuencia de
quiebras de los bancos europeos, que todavía no se
detiene. Cabe señalar que algunos bancos británicos
habían enfrentado dificultades desde antes.
Como lo ha señalado el gran historiador económico
Charles Kindleberger (Kindleberger y Aliber, 2005), la
frecuencia de las crisis financieras es un hecho recurrente
en la historia del capitalismo. Además, desde los años
sesenta se ha acentuado el surgimiento de perturbaciones
financieras de distinto tipo, coincidiendo con diversos
procesos de liberalización económica mundial (Bordo
y otros, 2001). En el caso de los Estados Unidos, esta
es la tercera crisis bancaria de las últimas décadas. La
primera fue la crisis latinoamericana de la deuda, que
fue hábilmente manejada a fin de que América Latina
Explicación: espero y te ayude