Siempre es igual. Descompones el radicando en potencia de un número primo y luego simplificas la fracción del exponente que se forma al convertir la raíz a potencia fraccionaria. Después vuelves a colocarlo como raíz.
Obviamente eso se hace siempre que la fracción que se forma en el exponente sea reducible.
Siempre es igual. Descompones el radicando en potencia de un número primo y luego simplificas la fracción del exponente que se forma al convertir la raíz a potencia fraccionaria. Después vuelves a colocarlo como raíz.
Obviamente eso se hace siempre que la fracción que se forma en el exponente sea reducible.
Saludos.