.Caramelos blandos tipo Sugus o terrones de azúcar
.Mantequilla o margarina
.Agua
.Maicena
.1 cuchillo de mantequilla
.1 bandeja de plástico poco profunda
.1 molde para tartas que quepa en la bandeja
.Tenedor
.Canicas
..Preparación
Empieza por cubrir la superficie de trabajo con papel de periódico o cualquier otro material que pueda proteger la superficie.
Pon un trozo de papel encerado sobre la mesa. Servirá para construir sobre él tu edificación de caramelo.
Desenvuelve los caramelos y crea un edificio uniendo cada uno de los pequeños ladrillos dulces con mantequilla.
Da igual cómo sea la estructura, lo importante que tenga varios pisos y que los superiores sean de menor tamaño a los que están en la base.
Recorta el papel encerado para que cubra la base de tu edificio de caramelo. Aparta hasta que tengas el resto del experimento listo.
Coge tres tazas de maicena y ponlas en un molde para tartas.
Añade una taza y media de agua y mezcla bien con ayuda de un tenedor o las manos. La masa tiene que ser ligera para que se pueda derramar pero lo suficientemente densa para soportar la construcción.
Pon las canicas sobre la bandeja y, encima de ellas, el molde con la masa de la maicena. Cuando muevas la bandeja, rodarán las canicas y se moverá la papilla. Es importante que el molde de tartas no llegue a golpear los lados de la bandeja.
Coloca el papel encerado con la construcción sobre el molde de maicena. Es importante que esté en el centro.
Sabrás que la mezcla tiene la textura perfecta si cuando lo levantes notas como si el edificio hubiese dejado una huella sobre la arena mojada de la playa. No se tiene que hundir.
Llega el momento de agitar la bandeja para que la mezcla de maicena se mueva.
Repite las sacudidas durante veinte segundos.
Pasado este tiempo observa si el edificio ha sufrido algún daño.
Haz de nuevo la operación. Verás como, poco a poco, el edificio dulce se empieza a resquebrajar con estos experimentos de terremotos para niños.
..Explicación
La masa de maicena es como la tierra, densa cuando soporta al edificio, pero se convierte en un líquido espeso cuando se agita.
Esto es lo que ocurre cuando movemos las canicas, nuestras placas tectónicas caseras. El movimiento que transmite a la papilla hace que se convierta en una masa espesa pero no sólida que no soporta el peso de tu edificio. Este proceso se llama licuefacción y pasa cuando una sustancia pasa de sólida a convertirse en un líquido pesado.
Es interesante que los niños prueben hacer este experimento con edificios de diferente planta y altura para que vean los que mejor resisten los terremotos. También puedes probar a cambiar la maicena por otros elementos como la plastilina y la granola de cereales mezclada con un poco de agua. Cada uno de ellos reacciona y forma diferente ante las pequeñas sacudidas que des a la bandeja.
Una vez que recojas el experimento es importante que tires la masa a la basura ya que puede obstruir las cañerías.
Respuesta:
Materiales
.Papel de periódico
.Papel encerado
.1 trapo
.Caramelos blandos tipo Sugus o terrones de azúcar
.Mantequilla o margarina
.Agua
.Maicena
.1 cuchillo de mantequilla
.1 bandeja de plástico poco profunda
.1 molde para tartas que quepa en la bandeja
.Tenedor
.Canicas
..Preparación
Empieza por cubrir la superficie de trabajo con papel de periódico o cualquier otro material que pueda proteger la superficie.
Pon un trozo de papel encerado sobre la mesa. Servirá para construir sobre él tu edificación de caramelo.
Desenvuelve los caramelos y crea un edificio uniendo cada uno de los pequeños ladrillos dulces con mantequilla.
Da igual cómo sea la estructura, lo importante que tenga varios pisos y que los superiores sean de menor tamaño a los que están en la base.
Recorta el papel encerado para que cubra la base de tu edificio de caramelo. Aparta hasta que tengas el resto del experimento listo.
Coge tres tazas de maicena y ponlas en un molde para tartas.
Añade una taza y media de agua y mezcla bien con ayuda de un tenedor o las manos. La masa tiene que ser ligera para que se pueda derramar pero lo suficientemente densa para soportar la construcción.
Pon las canicas sobre la bandeja y, encima de ellas, el molde con la masa de la maicena. Cuando muevas la bandeja, rodarán las canicas y se moverá la papilla. Es importante que el molde de tartas no llegue a golpear los lados de la bandeja.
Coloca el papel encerado con la construcción sobre el molde de maicena. Es importante que esté en el centro.
Sabrás que la mezcla tiene la textura perfecta si cuando lo levantes notas como si el edificio hubiese dejado una huella sobre la arena mojada de la playa. No se tiene que hundir.
Llega el momento de agitar la bandeja para que la mezcla de maicena se mueva.
Repite las sacudidas durante veinte segundos.
Pasado este tiempo observa si el edificio ha sufrido algún daño.
Haz de nuevo la operación. Verás como, poco a poco, el edificio dulce se empieza a resquebrajar con estos experimentos de terremotos para niños.
..Explicación
La masa de maicena es como la tierra, densa cuando soporta al edificio, pero se convierte en un líquido espeso cuando se agita.
Esto es lo que ocurre cuando movemos las canicas, nuestras placas tectónicas caseras. El movimiento que transmite a la papilla hace que se convierta en una masa espesa pero no sólida que no soporta el peso de tu edificio. Este proceso se llama licuefacción y pasa cuando una sustancia pasa de sólida a convertirse en un líquido pesado.
Es interesante que los niños prueben hacer este experimento con edificios de diferente planta y altura para que vean los que mejor resisten los terremotos. También puedes probar a cambiar la maicena por otros elementos como la plastilina y la granola de cereales mezclada con un poco de agua. Cada uno de ellos reacciona y forma diferente ante las pequeñas sacudidas que des a la bandeja.
Una vez que recojas el experimento es importante que tires la masa a la basura ya que puede obstruir las cañerías.
Explicación: