Como se expresa el contacto cultural entre europeos y americanos
LucyS2004
Observando detenidamente como se va conformando cualquier cultura con el paso del tiempo, podemos darnos cuenta de que aunque con ritmos y velocidades distintas, todas ellas, tienen un comportamiento dinámico y cambiante. Ya sea por causalidades externas, internas o casualidades, cualquier cultura, con el paso del tiempo va impregnándose y reaccionado con todo lo que le rodea provocando su transformación. El mero acto de existir exige la interacción y el conocimiento. El simple movimiento provoca inevitablemente la modificación de todo un conjunto de aspectos que dan paso a otros. Así, el concepto de cambio cultural siempre está presente en cualquier cultura por muy aislada que esté y por mucho que la propia cultura se empeñe en oponerse a ello. Para ilustrar esta idea podemos reflexionar sobre el primer contacto entre europeos y americanos. Contacto que removería bruscamente y de forma irreversible todo el escenario cultural anterior. Ese contacto no conllevó consigo únicamente la transformación de las diversas culturas que se encontraban en el continente americano, si no que a la larga produciría un profundo cambio también en la totalidad de las diversas culturas europeas provocando de esta forma la transformación de la totalidad de los elementos implicados. Por ejemplo, los españoles intentaron mediante la evangelización y la lengua homogeneizar y expandir su cultura hasta los confines más remotos. El presente demuestra que no pudieron evitar el surgimiento de nuevas realidades culturales que no estaban previstas. En el momento que los europeos entraron en contacto con los americanos se desencadeno un proceso de intercambio y seducción que aunque los europeos no fueran conscientes significó una participación a la revolución cultural en su propia cultura que participaría a conformar la realidad actual. Inevitablemente cuando hay contacto hay intercambio, no se puede pensar que una cultura puede relacionarse con otra sin que sufra modificaciones. A partir de que los europeos empezaron a relacionarse con las culturas y toda la realidad americana: paisajes, materiales, olores, sabores. Empezó un enamoramiento que haría brecha en su propia cultura. Además, a causa de ese contacto se empezaron a plantear preguntas que quizás jamás habrían tenido lugar en los europeos de no haber contactado con ello. Por esta razón por mucho que los primeros españoles quisieran mantener su cultura intacta y hacer un trasvase de la península al continente americano, llevando todo el paquete cultural y cercándose en grandes reservas coloniales, con el tiempo, surgirían sentimientos de identidad que se separarían de los europeos. Hoy en día un mexicano tiene una identidad que la diferencia de un español. Tanto el curso histórico de los españoles como el de aquellos criollos americanos ha sido bien distinto. Todos estos años el acontecer de la historia a provocado un fuerte distanciamiento entre ambos provocando de nuevo el fenómeno de la diversificación. Si los americanos estuvieron implicados en la intensa transformación cultural provocada por la llegada de los españoles, los españoles del antiguo régimen pocos años después se transformarían de forma igualmente drástica e irreversible a causa de la revolución francesa. No es desorbitado pensar que ese magno contacto entre dos continentes hasta entonces desconocidos diera la oportunidad a que pensamientos, sentimientos y voluntades que permanecían latentes ahora encontraran un acomodo y pudieran desarrollarse en este momento de gran inestabilidad y dinamismo terminando por transformar de forma paradójica toda la diversidad cultural europea en una nueva inaudita realidad cultural.
Para ilustrar esta idea podemos reflexionar sobre el primer contacto entre europeos y americanos. Contacto que removería bruscamente y de forma irreversible todo el escenario cultural anterior. Ese contacto no conllevó consigo únicamente la transformación de las diversas culturas que se encontraban en el continente americano, si no que a la larga produciría un profundo cambio también en la totalidad de las diversas culturas europeas provocando de esta forma la transformación de la totalidad de los elementos implicados.
Por ejemplo, los españoles intentaron mediante la evangelización y la lengua homogeneizar y expandir su cultura hasta los confines más remotos. El presente demuestra que no pudieron evitar el surgimiento de nuevas realidades culturales que no estaban previstas. En el momento que los europeos entraron en contacto con los americanos se desencadeno un proceso de intercambio y seducción que aunque los europeos no fueran conscientes significó una participación a la revolución cultural en su propia cultura que participaría a conformar la realidad actual.
Inevitablemente cuando hay contacto hay intercambio, no se puede pensar que una cultura puede relacionarse con otra sin que sufra modificaciones. A partir de que los europeos empezaron a relacionarse con las culturas y toda la realidad americana: paisajes, materiales, olores, sabores. Empezó un enamoramiento que haría brecha en su propia cultura. Además, a causa de ese contacto se empezaron a plantear preguntas que quizás jamás habrían tenido lugar en los europeos de no haber contactado con ello.
Por esta razón por mucho que los primeros españoles quisieran mantener su cultura intacta y hacer un trasvase de la península al continente americano, llevando todo el paquete cultural y cercándose en grandes reservas coloniales, con el tiempo, surgirían sentimientos de identidad que se separarían de los europeos.
Hoy en día un mexicano tiene una identidad que la diferencia de un español. Tanto el curso histórico de los españoles como el de aquellos criollos americanos ha sido bien distinto. Todos estos años el acontecer de la historia a provocado un fuerte distanciamiento entre ambos provocando de nuevo el fenómeno de la diversificación.
Si los americanos estuvieron implicados en la intensa transformación cultural provocada por la llegada de los españoles, los españoles del antiguo régimen pocos años después se transformarían de forma igualmente drástica e irreversible a causa de la revolución francesa.
No es desorbitado pensar que ese magno contacto entre dos continentes hasta entonces desconocidos diera la oportunidad a que pensamientos, sentimientos y voluntades que permanecían latentes ahora encontraran un acomodo y pudieran desarrollarse en este momento de gran inestabilidad y dinamismo terminando por transformar de forma paradójica toda la diversidad cultural europea en una nueva inaudita realidad cultural.