Así, desde 1821 hasta finales de 1823 el Estado-nación mexicano se construye desde el legado gaditano, desde la adopción de nuevas formas de identidad propia y desde el mantenimiento de pervivencias coloniales que durante la República serán suprimidas.
En el caso de México, la consumación de su independencia supondrá, además de la construcción de su Estado-nación, liberal, burgués, la adopción de la República como forma de gobierno y la asunción del federalismo. Sin embargo, los orígenes de ese federalismo y de ese Estado liberal no hay que buscarlos en los movimientos insurgentes de principios de siglo XIX sino en las propuestas autonomistas que los diputados novohispanos en particular y americanos en general, realizaron en su participación en las Cortes de Cádiz. De este modo, la legislación gaditana y la Constitución de 1812 serán los referentes a través de los cuales los "intelectuales orgánicos" en el México independiente construirán su propio Estado. Así, desde 1821 hasta finales de 1823 el Estado-nación mexicano se construye desde el legado gaditano, desde la adopción de nuevas formas de identidad propia y desde el mantenimiento de pervivencias coloniales que durante la República serán suprimidas.
Explicación:
Así, desde 1821 hasta finales de 1823 el Estado-nación mexicano se construye desde el legado gaditano, desde la adopción de nuevas formas de identidad propia y desde el mantenimiento de pervivencias coloniales que durante la República serán suprimidas.
En el caso de México, la consumación de su independencia supondrá, además de la construcción de su Estado-nación, liberal, burgués, la adopción de la República como forma de gobierno y la asunción del federalismo. Sin embargo, los orígenes de ese federalismo y de ese Estado liberal no hay que buscarlos en los movimientos insurgentes de principios de siglo XIX sino en las propuestas autonomistas que los diputados novohispanos en particular y americanos en general, realizaron en su participación en las Cortes de Cádiz. De este modo, la legislación gaditana y la Constitución de 1812 serán los referentes a través de los cuales los "intelectuales orgánicos" en el México independiente construirán su propio Estado. Así, desde 1821 hasta finales de 1823 el Estado-nación mexicano se construye desde el legado gaditano, desde la adopción de nuevas formas de identidad propia y desde el mantenimiento de pervivencias coloniales que durante la República serán suprimidas.