mariagomez17
Cuenta la leyenda que el dios Pan se enamoró de la ninfa Siringa que paseaba por los bosques danzando y cazando con su arco. Un día, Pan la persiguió hasta que el río Ladón se interpuso en su camino, pero la ninfa, viéndose amenazada, pidió socorro a las náyades, quienes la transformaron en caña. Pan, muy desconsolado, se percató de que el viento silbaba al pasar por la caña y pensó que eran los lamentos de la ninfa. Decidió cortar la caña y unió los trozos con cera; construyó así su siringa (flauta) para tocarla cuando la pasión y el deseo lo poseían. Conservada en la caverna de Diana, después de la muerte de Pan, esta flauta podía probar la virginidad de una muchacha por su sonido. Quizas al mismo tiempo en America... Cuenta la leyenda de aquel cañaveral, que un viejo campesino, de vuelta a casa, pudo escuchar los sonidos del viento colándose en las cañas quebradas y acariciando el oído con un sinfin de notas cual orquesta singular. A la mañana siguiente, comenzó a construir un curioso órgano de viento disponiendo caños en grupos de diferentes tamaños a lo largo de ese lado de la loma donde el Dios de los vientos hacía patente su presencia meciendo las hojas de las cañas y desgranando de ellas un dulce llorar... ETIMOLOGIA El nombre «zampoña» es una deformación de la palabra española «sinfonía». Probablemente haya sido como los indígenas del Alto Perú creían que se llamaba la música de los conquistadores españoles. La palabra «sinfonía», entre otras acepciones (según el Diccionario de la Real Academia Española), designaba un ‘instrumento musical’, presuntamente cuando en el s. XII fue utilizada para referirse a la cornamusa (un aerófono de lengüeta) o a la zanfonía (zanfona, otra deformación del vocablo greco-latino para un cordófono de fricción). El término proviene del latín symfonĭa, y éste a su vez del griego συμφωνία (symfonía, de σύμ [sým]: ‘simultáneo’ y φωνος [fonós]: ‘voz, sonido’): ‘que une su voz, acorde, unánime’, por lo que la acepción del 'instrumento musical' que se encuentra en el diccionario de la RAE, si bien dejó de usarse, puede explicar el origen de los términos zampoña y zanfonía (zanfona). La zampoña no emite sonidos simultáneos o acordes, sino un sonido a la vez (es instrumento melódico), mientras que la zanfonía sí puede emitir acordes por resonancia, por ejemplo.