El Manifiesto de Octubre teóricamente otorgaba a Rusia un régimen político similar al de los países democráticos occidentales. Ello suponía:
La concesión de libertades cívicas. La extensión del derecho al voto a todas las clases, es decir, el sufragio universal. La creación de una Duma (parlamento o asamblea) con poderes legislativos elegida democráticamente, con lo que la monarquía teóricamente pasaba de ser absoluta a constitucional. La autocracia daba paso a una cierta democracia En la práctica, no obstante, el zar se reservó el control de la Duma a través de un Consejo de Estado, el derecho a veto de los acuerdos que aquella tomase y la facultad de disolverla. En 1907 el sufragio universal fue abolido y sustituido por el sufragio censitario, con lo que las reformas del Manifiesto de Octubre quedaban desvirtuadas. El progresivo recorte de las medidas liberalizadoras conseguidas en 1905 ha llevado a denominar este período como el del "pseudo-constitucionalismo".
En el plano económico y social:
La necesidad de modernizar el agro, principal fuente de riqueza de Rusia llevó al primer ministro Stolypin a una serie de reformas:
Supresión del Mir al que habían quedado vinculados los campesinos a raíz de su emancipación en 1861. Reparto de las tierras comunales, divididas en lotes, entre los campesinos sin propiedades. Stolypin En la práctica, estas reformas fracasaron, debido a que muchos pequeños campesinos vendieron sus tierras a los grandes terratenientes (kulaks) y emigraron a las ciudades, con lo que la concentración de la propiedad de la tierra se acentuó. En las fechas previas a la revolución de 1917, unos 30.000 kulaks detentaban una gran parte de las tierras cultivables de Rusia. La burguesía vió parcialmente satisfechas sus aspiraciones con las reformas, pero los socialistas las consideraron totalmente insuficientes.
El Manifiesto de Octubre teóricamente otorgaba a Rusia un régimen político similar al de los países democráticos occidentales. Ello suponía:
La concesión de libertades cívicas.
La extensión del derecho al voto a todas las clases, es decir, el sufragio universal.
La creación de una Duma (parlamento o asamblea) con poderes legislativos elegida democráticamente, con lo que la monarquía teóricamente pasaba de ser absoluta a constitucional. La autocracia daba paso a una cierta democracia
En la práctica, no obstante, el zar se reservó el control de la Duma a través de un Consejo de Estado, el derecho a veto de los acuerdos que aquella tomase y la facultad de disolverla.
En 1907 el sufragio universal fue abolido y sustituido por el sufragio censitario, con lo que las reformas del Manifiesto de Octubre quedaban desvirtuadas.
El progresivo recorte de las medidas liberalizadoras conseguidas en 1905 ha llevado a denominar este período como el del "pseudo-constitucionalismo".
En el plano económico y social:
La necesidad de modernizar el agro, principal fuente de riqueza de Rusia llevó al primer ministro Stolypin a una serie de reformas:
Supresión del Mir al que habían quedado vinculados los campesinos a raíz de su emancipación en 1861.
Reparto de las tierras comunales, divididas en lotes, entre los campesinos sin propiedades.
Stolypin
En la práctica, estas reformas fracasaron, debido a que muchos pequeños campesinos vendieron sus tierras a los grandes terratenientes (kulaks) y emigraron a las ciudades, con lo que la concentración de la propiedad de la tierra se acentuó. En las fechas previas a la revolución de 1917, unos 30.000 kulaks detentaban una gran parte de las tierras cultivables de Rusia.
La burguesía vió parcialmente satisfechas sus aspiraciones con las reformas, pero los socialistas las consideraron totalmente insuficientes.