Comienza con secreciones hormonales, que desencadenan un rápido crecimiento. Durante este proceso, se desarrollan los caracteres sexuales primarios y los secundarios. En ambos sexos aparece el vello pubiano y axilar. En las chicas se produce un aumento del tamaño de la cadera y los pechos, y a los chicos le aparece el vello facial y la voz grave.
La pubertad puede determinarse con señales objetivas: la aparición de la menstruación, la capacidad de eyaculación...
La fecha de la monarquía no sólo depende de factores madurativos. Se ha comprobado que se adelanta en las ciudades y en los países más cálidos, mientras que se retrasa en lo países fríos.
B) Cambios psicológicos.
La adolescencia es una fase de reafirmación del Yo, el individuo toma consciencia de sí mismo y adquiere mayor control emocional.
Se produce el deseo de querer alcanzar mayor independencia y libertad; el adolescente quiere más autonomía y busca nuevas experiencias, pierde la confianza básica en la familia y se siente extraño y angustiado con el mundo.
Esta situación hace que el adolescente tenga un comportamiento susceptible, arrogante y crítico. Reconoce la madurez de su pensamiento, sube su inteligencia práctica y creativa, es consciente de las consecuencias de sus actos y posee una sexualidad equiparable a la de los adultos.
A) Cambios físicos en la pubertad.
Comienza con secreciones hormonales, que desencadenan un rápido crecimiento. Durante este proceso, se desarrollan los caracteres sexuales primarios y los secundarios. En ambos sexos aparece el vello pubiano y axilar. En las chicas se produce un aumento del tamaño de la cadera y los pechos, y a los chicos le aparece el vello facial y la voz grave.
La pubertad puede determinarse con señales objetivas: la aparición de la menstruación, la capacidad de eyaculación...
La fecha de la monarquía no sólo depende de factores madurativos. Se ha comprobado que se adelanta en las ciudades y en los países más cálidos, mientras que se retrasa en lo países fríos.
B) Cambios psicológicos.
La adolescencia es una fase de reafirmación del Yo, el individuo toma consciencia de sí mismo y adquiere mayor control emocional.
Se produce el deseo de querer alcanzar mayor independencia y libertad; el adolescente quiere más autonomía y busca nuevas experiencias, pierde la confianza básica en la familia y se siente extraño y angustiado con el mundo.
Esta situación hace que el adolescente tenga un comportamiento susceptible, arrogante y crítico. Reconoce la madurez de su pensamiento, sube su inteligencia práctica y creativa, es consciente de las consecuencias de sus actos y posee una sexualidad equiparable a la de los adultos.