Eran tratados como animales salvajes, como si no fuesen seres humanos, con tratos inhumanos y degradantes.
Los esclavos eran forzados y explotados en los yacimientos mineros, en labores agrícolas, a la cría de ganado y al transporte de mercancías, así como también a la merced de sus dueños.
El tráfico de esclavos tuvo su auge con el Descubrimiento de América en 1492, provenientes en su mayoría de África.
Eran tratados como animales salvajes, como si no fuesen seres humanos, con tratos inhumanos y degradantes.
Los esclavos eran forzados y explotados en los yacimientos mineros, en labores agrícolas, a la cría de ganado y al transporte de mercancías, así como también a la merced de sus dueños.
El tráfico de esclavos tuvo su auge con el Descubrimiento de América en 1492, provenientes en su mayoría de África.