Jornadas de trabajo de 10 a 16 horas, había abuso y explotación infantil, sí son similares en especial en la clase baja en donde existen madres solteras que trabajan hasta 12 horas o niños que podemos ver trabajando en las calles para ayudar al sustento de su familia.
Eran terribles, le hacían trabajar cantidades insalubres de tiempo, a veces sin ningún tipo de medida de seguridad, pagandoles cantidades de dinero inferiores a las que se necesitaban para vivir, y en ocasiones optaban por contratar niños por la facilidad que tenían para pagarles incluso menos que a los adultos; sin conceptos como la seguridad social o las vacaciones.
Actualmente las condiciones han mejorado mucho, hay sitios donde la explotación se sigue dando, pero esos sitios se rechazan públicamente y tratan de erradicarse, los sueldos mínimos en la mayor parte del mundo están condicionados a no menos de lo que cuesta llevar una vida decente cada día; con mayores prestaciones y periodos de descanso prolongados como las vacaciones y los días festivos; también se limita el tiempo de trabajo a un tiempo máximo, pudiendo superarse a cambio de una paga superior por cada hora que se supere, teniendo esta un límite.
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Jornadas de trabajo de 10 a 16 horas, había abuso y explotación infantil, sí son similares en especial en la clase baja en donde existen madres solteras que trabajan hasta 12 horas o niños que podemos ver trabajando en las calles para ayudar al sustento de su familia.
Eran terribles, le hacían trabajar cantidades insalubres de tiempo, a veces sin ningún tipo de medida de seguridad, pagandoles cantidades de dinero inferiores a las que se necesitaban para vivir, y en ocasiones optaban por contratar niños por la facilidad que tenían para pagarles incluso menos que a los adultos; sin conceptos como la seguridad social o las vacaciones.
Actualmente las condiciones han mejorado mucho, hay sitios donde la explotación se sigue dando, pero esos sitios se rechazan públicamente y tratan de erradicarse, los sueldos mínimos en la mayor parte del mundo están condicionados a no menos de lo que cuesta llevar una vida decente cada día; con mayores prestaciones y periodos de descanso prolongados como las vacaciones y los días festivos; también se limita el tiempo de trabajo a un tiempo máximo, pudiendo superarse a cambio de una paga superior por cada hora que se supere, teniendo esta un límite.