Para mediados de la década de 1870, la ciudad de Tacna poseía una población de 7.738 personas. Era la cabeza de un distrito que se dividía en tres provincias: Arica, Tacna y Tarata. Asimismo, la provincia estaba dividida en una serie de distritos que, en su conjunto, totalizaban una población de 10.778 almas. La ciudad ocupaba una gran extensión de N.E. a S.O. y su mayor ancho no llega a 800 metros. Era un pueblo de bastante estension, que contaba con muchos buenos establecimientos de comercio y una distinguida sociedad. Sus calles estaban cortadas casi en ángulo recto; su plaza principal, llamada de Armas, juega una fuente y contaba tambien con otro bonito paseo, llamado Pasage Vigil. Contaba además con un hospital, un teatro pequeño, varias plazas, una alameda muy bonita y una iglesia en construcción. Un constante crecimiento económico y comercial, iniciado alrededor de 1850, la situaba como el segundo o tercer lugar de importancia después de Lima por el espíritu progresista de sus vecinos. Junto con el cercano puerto de Arica, formaba parte de los flujos comerciales y las actividades mercantiles y agrícolas de la provincia, donde la actividad portuaria y el tráfico internacional eran fundamentales para sus economías, estableciendo una plataforma para el intercambio mercantil en la región sur andina, siendo Arica el puerto de embarque y descarga de productos, y Tacna el lugar de almacenaje.
La agricultura estaba orientada en los cultivos de vides, forrajes, algodón y otros productos para el consumo local. Los once ayllus circundantes, habitados en su mayoría por indígenas, contribuían al surtido mercado con la producción de sus pequeñas chacras y chacarillas, al mismo tiempo en que las haciendas de Para, Piedra Blanca y Peschay cubrían la demanda por pastos y alfalfas.
La población seguía la estructura social peruana, en la cual la élite local ejercía una fuerte influencia en las decisiones comunitarias, pese a estar conformada por un reducido número de comerciantes extranjeros y hacendados exportadores. Los artesanos constituían un importante grupo productivo y las clases populares agrupaban a indígenas y afrodescendientes.
Cuadro: Población total según condición racial :
Condición Cantidad
Blancos 3.347
Indígenas 5.786
Negros 194
Mestizos 1.397
Asiáticos 54
TOTAL 10.778
(Fuente: Censo General de la República del Perú…, op. cit., tomo VII.)
En el plano institucional, al ser una ciudad-capital, las reparticiones del Estado estaban encabezadas por la casa de gobierno, la Corte de Justicia, dos juzgados de primera instancia y la Municipalidad. La máxima autoridad local era el prefecto departamental, mientras que el alcalde se preocupaba de las tareas edilicias.
Para Tacna, el impacto de la guerra con Chile comenzó a sentirse con el nacimiento del conflicto. Hasta fines de febrero de 1879, la tensión diplomática en la región salitrera de Antofagasta se había limitado a las discrepancias entre Chile y Bolivia, a propósito del aumento tributario que este último había decretado sobre los empresarios del departamento del litoral; lo que, a juicio del primero, constituía una violación del tratado de límites suscrito por ambos países en 1874. Perú se vio involucrado por su presencia en un tratado de alianza suscrito con la nación altiplánica en 1873, lo que desencadenaría las declaraciones de guerra correspondientes y el inicio de las actividades bélicas.
TACNA ANTES DE LA GUERRA.
Para mediados de la década de 1870, la ciudad de Tacna poseía una población de 7.738 personas. Era la cabeza de un distrito que se dividía en tres provincias: Arica, Tacna y Tarata. Asimismo, la provincia estaba dividida en una serie de distritos que, en su conjunto, totalizaban una población de 10.778 almas. La ciudad ocupaba una gran extensión de N.E. a S.O. y su mayor ancho no llega a 800 metros. Era un pueblo de bastante estension, que contaba con muchos buenos establecimientos de comercio y una distinguida sociedad. Sus calles estaban cortadas casi en ángulo recto; su plaza principal, llamada de Armas, juega una fuente y contaba tambien con otro bonito paseo, llamado Pasage Vigil. Contaba además con un hospital, un teatro pequeño, varias plazas, una alameda muy bonita y una iglesia en construcción. Un constante crecimiento económico y comercial, iniciado alrededor de 1850, la situaba como el segundo o tercer lugar de importancia después de Lima por el espíritu progresista de sus vecinos. Junto con el cercano puerto de Arica, formaba parte de los flujos comerciales y las actividades mercantiles y agrícolas de la provincia, donde la actividad portuaria y el tráfico internacional eran fundamentales para sus economías, estableciendo una plataforma para el intercambio mercantil en la región sur andina, siendo Arica el puerto de embarque y descarga de productos, y Tacna el lugar de almacenaje.
La agricultura estaba orientada en los cultivos de vides, forrajes, algodón y otros productos para el consumo local. Los once ayllus circundantes, habitados en su mayoría por indígenas, contribuían al surtido mercado con la producción de sus pequeñas chacras y chacarillas, al mismo tiempo en que las haciendas de Para, Piedra Blanca y Peschay cubrían la demanda por pastos y alfalfas.
La población seguía la estructura social peruana, en la cual la élite local ejercía una fuerte influencia en las decisiones comunitarias, pese a estar conformada por un reducido número de comerciantes extranjeros y hacendados exportadores. Los artesanos constituían un importante grupo productivo y las clases populares agrupaban a indígenas y afrodescendientes.
Cuadro: Población total según condición racial :
Condición Cantidad
Blancos 3.347
Indígenas 5.786
Negros 194
Mestizos 1.397
Asiáticos 54
TOTAL 10.778
(Fuente: Censo General de la República del Perú…, op. cit., tomo VII.)
En el plano institucional, al ser una ciudad-capital, las reparticiones del Estado estaban encabezadas por la casa de gobierno, la Corte de Justicia, dos juzgados de primera instancia y la Municipalidad. La máxima autoridad local era el prefecto departamental, mientras que el alcalde se preocupaba de las tareas edilicias.
Para Tacna, el impacto de la guerra con Chile comenzó a sentirse con el nacimiento del conflicto. Hasta fines de febrero de 1879, la tensión diplomática en la región salitrera de Antofagasta se había limitado a las discrepancias entre Chile y Bolivia, a propósito del aumento tributario que este último había decretado sobre los empresarios del departamento del litoral; lo que, a juicio del primero, constituía una violación del tratado de límites suscrito por ambos países en 1874. Perú se vio involucrado por su presencia en un tratado de alianza suscrito con la nación altiplánica en 1873, lo que desencadenaría las declaraciones de guerra correspondientes y el inicio de las actividades bélicas.