Las primeras batallas y choques navales se produjeron en 1914 pero fuera de las aguas europeas. La flota británica salió victoriosa frente a la alemana en las islas Malvinas, lo que permitió que Londres mantuviese el control de las rutas del Atlántico sur. Los enfrentamientos directos casi desaparecieron frente al protagonismo de la guerra submarina que emprendieron los alemanes para intentar cortar los suministros a británicos y franceses
Las primeras batallas y choques navales se produjeron en 1914 pero fuera de las aguas europeas. La flota británica salió victoriosa frente a la alemana en las islas Malvinas, lo que permitió que Londres mantuviese el control de las rutas del Atlántico sur. Los enfrentamientos directos casi desaparecieron frente al protagonismo de la guerra submarina que emprendieron los alemanes para intentar cortar los suministros a británicos y franceses