florcita2458
El concepto de cambio de velocidades es aquel que se aplica al proceso mediante el cual un vehículo puede cambiar de velocidades a partir del uso de tecnología especialmente creada para eso. El cambio de velocidades está disponible tanto para autos como para otros vehículos motorizados, pero también para bicicletas profesionales que requieren mayor diversidad de opciones para poder ser usadas en diferentes superficies y espacios.
El cambio de velocidades es lo que permite que un vehículo pase de estar parado o en estado de reposo a adquirir velocidad, pudiendo ser esta de diferente tipo o potencia. En la mayoría de los vehículos motorizados, la posibilidad de cambio de velocidades permite pasar del estado de reposo a cinco diferentes velocidades, siendo la quinta la más potente y la que hace que el vehículo en cuestión vaya lo más rápido posible. Este cambio de velocidades, al ser progresivo y no repentino al menos en el pasaje de una velocidad a la otra, permite que el auto pueda adquirir esa velocidad deseada pero además mantenerla en el tiempo de modo tal que se siga avanzando de manera permanente.
En el caso de las bicicletas, el sistema es el mismo pero no encontramos en este tipo de vehículos un motor, por lo cual el cambio de velocidades es meramente mecánico. Algunos diseños particulares de autos también poseen un sistema de cambio de velocidades mecánica mientras que en la mayoría de los casos es automática. El cambio de velocidades en la bicicleta también permite que la misma pueda ser utilizada a mayor velocidad, aunque de cualquier manera sigue siendo el ciclista quien impulsa el movimiento y no un motor. La única diferencia entre una bicicleta normal y una con cambio de velocidades es que esta última permite al ciclista adquirir mayor velocidad de modo mucho más accesible.
El cambio de velocidades es lo que permite que un vehículo pase de estar parado o en estado de reposo a adquirir velocidad, pudiendo ser esta de diferente tipo o potencia. En la mayoría de los vehículos motorizados, la posibilidad de cambio de velocidades permite pasar del estado de reposo a cinco diferentes velocidades, siendo la quinta la más potente y la que hace que el vehículo en cuestión vaya lo más rápido posible. Este cambio de velocidades, al ser progresivo y no repentino al menos en el pasaje de una velocidad a la otra, permite que el auto pueda adquirir esa velocidad deseada pero además mantenerla en el tiempo de modo tal que se siga avanzando de manera permanente.
En el caso de las bicicletas, el sistema es el mismo pero no encontramos en este tipo de vehículos un motor, por lo cual el cambio de velocidades es meramente mecánico. Algunos diseños particulares de autos también poseen un sistema de cambio de velocidades mecánica mientras que en la mayoría de los casos es automática. El cambio de velocidades en la bicicleta también permite que la misma pueda ser utilizada a mayor velocidad, aunque de cualquier manera sigue siendo el ciclista quien impulsa el movimiento y no un motor. La única diferencia entre una bicicleta normal y una con cambio de velocidades es que esta última permite al ciclista adquirir mayor velocidad de modo mucho más accesible.