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Álvaro Menéndez Leal nació en Santa Ana, El Salvador, el 13 de marzo de 1932. Perteneció a la llamada Generación Comprometida junto con Manlio Argueta, Italo López Vallecillos, Roque Dalton y otros. Álvaro Menéndez Leal, cuentista y dramaturgo, que escribió bajo el seudónimo de Álvaro Menen Desleal. El seudónimo no se trata de un juego de silabas, sino de las diferencias imperceptibles que a veces existen entre el bien y el mal. A lo que mas le quería ser énfasis el autor con su seudónimo es a la lealtad y a la Des Lealtad. Menen Desleal fue famoso en toda América y Europa, especialmente en Argentina donde vivió por muchos años, en Francia y Alemania, donde dio clases de literatura lo mismo que en algunas universidades de los Estados Unidos.
Poeta, narrador, ensayista y dramaturgo salvadoreño, nacido en Santa Ana el 13 de marzo de 1931 y fallecido el 6 de abril de 2000 en San Salvador. Autor de una obra lúcida y versátil que abarca casi todos los géneros, por la profundidad y vigor de sus piezas teatrales ha quedado adscrito a la nómina de los dramaturgos impulsores y renovadores del teatro hispanoamericano en la segunda mitad del siglo XX.
Su temprana vocación humanística le llevó desde muy joven al cultivo de la literatura, así como al ejercicio periodístico, mediante el cual se introdujo en los principales círculos culturales salvadoreños. Sus primeros éxitos literarios los cosechó en la difícil parcela de la narrativa breve, en la que se labró un merecido prestigio merced a su participación en el Certamen Nacional de Cultura de 1962, donde fue galardonado con el segundo premio en la modalidad de cuento. Seis años después se convertiría en vencedor de este mismo certamen, pero en una modalidad totalmente ajena a su vocación literaria: el urbanismo.
Su prometedora carrera en el mundo de las Letras centroamericanas recibió un impulso decisivo en 1965, cuando se alzó con el primer premio de los Juegos Florales Hispanoamericanos Conmemorativos de Quezaltenango (Guatemala), gracias a su obra teatral titulada Luz negra. Se trata de una pieza que, desde entonces, ha sido reeditada y llevada a las tablas en numerosas ocasiones, tanto dentro como fuera de las fronteras salvadoreñas, hasta el punto de haberse convertido en una obra emblemática del teatro americano contemporáneo.
Pero los éxitos literarios de Álvaro Menéndez Leal no pararon aquí: en 1970, de regreso al género cuentístico, fue galardonado con el primer premio del prestigioso Certamen Centroamericano "Miguel Ángel Asturias", convocado por el Consejo Superior Universitario Centroamericano (CSUCA). La obra vencedora era una recopilación de relatos que, agrupados bajo el bello título de Revolución en el país que edificó un castillo de hadas, vio la luz en San José de Costa Rica en 1971.
Veinte años después, Álvaro Menéndez Leal volvió a situarse a la cabeza de los autores salvadoreños galardonados en concursos literarios de prestigio, esta vez gracias a su pieza teatral titulada La bicicleta al pie de la muralla, que se alzó con el primer premio en el Certamen Nacional de Literatura convocado por la Universidad de El Salvador en 1991, para festejar su centésimo quincuagésimo aniversario. La repercusión de todos estos galardones ha convertido al escritor de Santa Ana en uno de los autores más leídos y traducidos de la literatura salvadoreña contemporánea, con una difusión internacional tan extendida que ha motivado la traducción de algunas de sus obras a lenguas tan alejadas de su ámbito geo-cultural como el inglés, el francés, el alemán, el portugués, el danés y el rumano.
Además de los títulos citados en parágrafos anteriores, Álvaro Menéndez Leal publicó también La llave (1962), Cuentos breves y maravillosos (1963), El extraño habitante (1964), Una cuerda de nylon y oro (1969), La ilustre familia androide(1972), Hacer el amor en el refugio atómico (1974) y Los vicios de papá (1978).
Álvaro Menéndez Leal, cuentista y dramaturgo, que escribió bajo el seudónimo de Álvaro Menen Desleal. El seudónimo no se trata de un juego de silabas, sino de las diferencias imperceptibles que a veces existen entre el bien y el mal. A lo que mas le quería ser énfasis el autor con su seudónimo es a la lealtad y a la Des Lealtad. Menen Desleal fue famoso en toda América y Europa, especialmente en Argentina donde vivió por muchos años, en Francia y Alemania, donde dio clases de literatura lo mismo que en algunas universidades de los Estados Unidos.
Poeta, narrador, ensayista y dramaturgo salvadoreño, nacido en Santa Ana el 13 de marzo de 1931 y fallecido el 6 de abril de 2000 en San Salvador. Autor de una obra lúcida y versátil que abarca casi todos los géneros, por la profundidad y vigor de sus piezas teatrales ha quedado adscrito a la nómina de los dramaturgos impulsores y renovadores del teatro hispanoamericano en la segunda mitad del siglo XX.
Su temprana vocación humanística le llevó desde muy joven al cultivo de la literatura, así como al ejercicio periodístico, mediante el cual se introdujo en los principales círculos culturales salvadoreños. Sus primeros éxitos literarios los cosechó en la difícil parcela de la narrativa breve, en la que se labró un merecido prestigio merced a su participación en el Certamen Nacional de Cultura de 1962, donde fue galardonado con el segundo premio en la modalidad de cuento. Seis años después se convertiría en vencedor de este mismo certamen, pero en una modalidad totalmente ajena a su vocación literaria: el urbanismo.
Su prometedora carrera en el mundo de las Letras centroamericanas recibió un impulso decisivo en 1965, cuando se alzó con el primer premio de los Juegos Florales Hispanoamericanos Conmemorativos de Quezaltenango (Guatemala), gracias a su obra teatral titulada Luz negra. Se trata de una pieza que, desde entonces, ha sido reeditada y llevada a las tablas en numerosas ocasiones, tanto dentro como fuera de las fronteras salvadoreñas, hasta el punto de haberse convertido en una obra emblemática del teatro americano contemporáneo.
Pero los éxitos literarios de Álvaro Menéndez Leal no pararon aquí: en 1970, de regreso al género cuentístico, fue galardonado con el primer premio del prestigioso Certamen Centroamericano "Miguel Ángel Asturias", convocado por el Consejo Superior Universitario Centroamericano (CSUCA). La obra vencedora era una recopilación de relatos que, agrupados bajo el bello título de Revolución en el país que edificó un castillo de hadas, vio la luz en San José de Costa Rica en 1971.
Veinte años después, Álvaro Menéndez Leal volvió a situarse a la cabeza de los autores salvadoreños galardonados en concursos literarios de prestigio, esta vez gracias a su pieza teatral titulada La bicicleta al pie de la muralla, que se alzó con el primer premio en el Certamen Nacional de Literatura convocado por la Universidad de El Salvador en 1991, para festejar su centésimo quincuagésimo aniversario. La repercusión de todos estos galardones ha convertido al escritor de Santa Ana en uno de los autores más leídos y traducidos de la literatura salvadoreña contemporánea, con una difusión internacional tan extendida que ha motivado la traducción de algunas de sus obras a lenguas tan alejadas de su ámbito geo-cultural como el inglés, el francés, el alemán, el portugués, el danés y el rumano.
Además de los títulos citados en parágrafos anteriores, Álvaro Menéndez Leal publicó también La llave (1962), Cuentos breves y maravillosos (1963), El extraño habitante (1964), Una cuerda de nylon y oro (1969), La ilustre familia androide(1972), Hacer el amor en el refugio atómico (1974) y Los vicios de papá (1978).