Luis Antonio Robles nació en una familia campesina. Su padre, Luis Robles, era un miembro prominente de la familia Robles de la ciudad de Riohacha, quienes fueron pequeños hacendados poseedores de africanos esclavizados para la tarea de cultivo principalmente; pregonaba el liberalismo de mediados del siglo XIX en la provincia de Padilla, así como también abanderaba la masonería en esa ciudad bajo la figura de Pío Robles. El señor Robles se enamoró de una mujer negra, esclavizada en su finca, llamada Manuela Suárez, con la cual procreó un hijo primogénito de color blanco, que falleció súbitamente tiempo después; y de nuevo volvieron a procrear un hijo, esta vez de color negro, a quien bautizaron como Luis Antonio.2
Los padres de Luis Robles, aunque eran muy liberales, no consentían la relación que este sostuvo con aquella esclava, pues él se enamoró de ella y quería formar una familia normal, situación que para la época era inadecuada. Por esto, se dio la libertad a la mujer, años antes de que en Colombia se aboliera el sistema esclavista.
Estudios
Robles fue hijo único. Su familia residió en la comunidad de Camarones, donde su padre se dedicaba a enseñar en una escuela de la época. Sus padres le inculcaron la dedicación por el estudio y el valor del mismo, y se preocuparon porque su hijo recibiera todos los grados académicos necesarios y asistiera a un centro de educación superior, sabiendo que por ser mulato su hijo tendría trabas en el camino.
Después de terminar sus estudios básicos en Cartagena, Luis Robles fue enviado a Bogotá para cursar estudios de Derecho en el «Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario», hoy Universidad del Rosario, donde entró con facilidad, debido a que el Rector del alma máter procedía de una comunidad rural, era liberal y masón. El rector comprendió la situación de la familia debido a que, como él, las personas campesinas eran discriminadas por las sociedades de las urbes.
Robles se graduó como abogado en 1872, siendo prolífico en política. Este hombre se convertiría en el personaje más sobresaliente de Colombia de finales de siglo XIX.
Infancia
Luis Antonio Robles nació en una familia campesina. Su padre, Luis Robles, era un miembro prominente de la familia Robles de la ciudad de Riohacha, quienes fueron pequeños hacendados poseedores de africanos esclavizados para la tarea de cultivo principalmente; pregonaba el liberalismo de mediados del siglo XIX en la provincia de Padilla, así como también abanderaba la masonería en esa ciudad bajo la figura de Pío Robles. El señor Robles se enamoró de una mujer negra, esclavizada en su finca, llamada Manuela Suárez, con la cual procreó un hijo primogénito de color blanco, que falleció súbitamente tiempo después; y de nuevo volvieron a procrear un hijo, esta vez de color negro, a quien bautizaron como Luis Antonio.2
Los padres de Luis Robles, aunque eran muy liberales, no consentían la relación que este sostuvo con aquella esclava, pues él se enamoró de ella y quería formar una familia normal, situación que para la época era inadecuada. Por esto, se dio la libertad a la mujer, años antes de que en Colombia se aboliera el sistema esclavista.
Estudios
Robles fue hijo único. Su familia residió en la comunidad de Camarones, donde su padre se dedicaba a enseñar en una escuela de la época. Sus padres le inculcaron la dedicación por el estudio y el valor del mismo, y se preocuparon porque su hijo recibiera todos los grados académicos necesarios y asistiera a un centro de educación superior, sabiendo que por ser mulato su hijo tendría trabas en el camino.
Después de terminar sus estudios básicos en Cartagena, Luis Robles fue enviado a Bogotá para cursar estudios de Derecho en el «Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario», hoy Universidad del Rosario, donde entró con facilidad, debido a que el Rector del alma máter procedía de una comunidad rural, era liberal y masón. El rector comprendió la situación de la familia debido a que, como él, las personas campesinas eran discriminadas por las sociedades de las urbes.
Robles se graduó como abogado en 1872, siendo prolífico en política. Este hombre se convertiría en el personaje más sobresaliente de Colombia de finales de siglo XIX.