El Estado moderno surgió entre los siglos XV y XVI, cuando los reyes aprovecharon la crisis del feudalismo para retomar su poder, y su proceso de surgimiento se aceleró en el Renacimiento, con profundas transformaciones en los mecanismos del gobierno y en el ejercicio del poder. Este proceso estuvo respaldado por la burguesía, clase social que se fue fortaleciendo con este tipo de Estado. El Estado moderno poseía identidad, estaba organizado, estructurado y era formal; era reconocido políticamente por esto y el poder estaba centralizado. Su formación tuvo varias consecuencias a nivel político y económico.
El Estado moderno surgió entre los siglos XV y XVI, cuando los reyes aprovecharon la crisis del feudalismo para retomar su poder, y su proceso de surgimiento se aceleró en el Renacimiento, con profundas transformaciones en los mecanismos del gobierno y en el ejercicio del poder. Este proceso estuvo respaldado por la burguesía, clase social que se fue fortaleciendo con este tipo de Estado. El Estado moderno poseía identidad, estaba organizado, estructurado y era formal; era reconocido políticamente por esto y el poder estaba centralizado. Su formación tuvo varias consecuencias a nivel político y económico.