Pintora y dibujante, Isabel de Santiago fue una de las máximas exponentes de la escuela quiteña, una corriente artística que fue reconocida a lo largo del continente durante el periodo colonial. Aprendió pintura de su padre, el artista Miguel de Santiago, y eventualmente heredó su taller, aunque buena parte de su práctica artística estuvo destinada a pagar deudas dejadas por su padre y esposo. Aunque le fue negado el examen para certificarse como pintora profesional, se convirtió en una de las artistas más reconocidas entre la alta sociedad quiteña por la “admirable delicadeza” de su estilo. El motivo más recurrente en sus pinturas son la Virgen María y la infancia del niño Jesús.
Respuesta:
Pintora y dibujante, Isabel de Santiago fue una de las máximas exponentes de la escuela quiteña, una corriente artística que fue reconocida a lo largo del continente durante el periodo colonial. Aprendió pintura de su padre, el artista Miguel de Santiago, y eventualmente heredó su taller, aunque buena parte de su práctica artística estuvo destinada a pagar deudas dejadas por su padre y esposo. Aunque le fue negado el examen para certificarse como pintora profesional, se convirtió en una de las artistas más reconocidas entre la alta sociedad quiteña por la “admirable delicadeza” de su estilo. El motivo más recurrente en sus pinturas son la Virgen María y la infancia del niño Jesús.
otros artistas:
MANUEL DE SAMANIEGO (1767-1824)
VÍCTOR MIDEIROS (1888-1967)
MANUEL RENDÓN SEMINARIO (1894-1982
ALBA CALDERÓN (1908-1992)
creo que son eso XD