Argumento de la importancia de excretar algunas sustancias
mariarayosandoval
Cuando excretamos expulsamos las sustancias que no necesitamos y tambienalguans sustancias toxicas Para mantenerse con vida y en un buen estado de salud, un organismo no debe sólo proveerse de alimento y de oxígeno, sino que también tiene que eliminar los residuos producidos por su actividad metabólica. De no ser así, se acumularían y le producirían la muerte. Además, las células de todo organismo necesitan mantener un ambiente adecuado y con poca variación para desarrollar su actividad. De estas funciones se encarga el sistema excretor.
Órganos excretores en invertebrados Los animales invertebrados han sufrido un proceso evolutivo, desde los más simples que no poseen estructuras excretoras especializadas, como las esponjas y las medusas, etc., en los cuales los productos de desecho pasan directamente por difusión al medio externo hasta otros más complejos, que poseen ciertas estructuras denominadas nefridios. Estos son órganos excretores que constan de una serie de tubos simples o ramificados que desembocan en el exterior del cuerpo del animal a través de poros excretores. Se encuentran en anélidos (gusanos) y platelmintos (gusanos planos). En los insectos, el aparato excretor lo forman los llamados tubos de Malpighi, que son tubos delgados con un extremo cerrado y localizado en la cavidad del cuerpo y el otro que desemboca en el intestino posterior. Los residuos pasan de la sangre a los tubos de Malpighi y de estos al tubo digestivo, donde son eliminados.
Excreción en vertebrados En casi todos los vertebrados, para mantener el equilibrio interno del cuerpo, intervienen el aparato excretor (riñones, uréter, vejiga, uretra), la piel, las estructuras respiratorias (pulmones, branquias, etc.) y, en cierto grado, el aparato digestivo, que elimina los pigmentos biliares producidos en el hígado por la degradación de la hemoglobina.
Para mantenerse con vida y en un buen estado de salud, un organismo no debe sólo proveerse de alimento y de oxígeno, sino que también tiene que eliminar los residuos producidos por su actividad metabólica. De no ser así, se acumularían y le producirían la muerte. Además, las células de todo organismo necesitan mantener un ambiente adecuado y con poca variación para desarrollar su actividad. De estas funciones se encarga el sistema excretor.
Órganos excretores en invertebrados
Los animales invertebrados han sufrido un proceso evolutivo, desde los más simples que no poseen estructuras excretoras especializadas, como las esponjas y las medusas, etc., en los cuales los productos de desecho pasan directamente por difusión al medio externo hasta otros más complejos, que poseen ciertas estructuras denominadas nefridios. Estos son órganos excretores que constan de una serie de tubos simples o ramificados que desembocan en el exterior del cuerpo del animal a través de poros excretores. Se encuentran en anélidos (gusanos) y platelmintos (gusanos planos). En los insectos, el aparato excretor lo forman los llamados tubos de Malpighi, que son tubos delgados con un extremo cerrado y localizado en la cavidad del cuerpo y el otro que desemboca en el intestino posterior. Los residuos pasan de la sangre a los tubos de Malpighi y de estos al tubo digestivo, donde son eliminados.
Excreción en vertebrados
En casi todos los vertebrados, para mantener el equilibrio interno del cuerpo, intervienen el aparato excretor (riñones, uréter, vejiga, uretra), la piel, las estructuras respiratorias (pulmones, branquias, etc.) y, en cierto grado, el aparato digestivo, que elimina los pigmentos biliares producidos en el hígado por la degradación de la hemoglobina.