editaesther
La legitimidad del poder hace referencia a la justificación de la autoridad de mandar y peticionar obediencia a los gobernados, obtenida por consenso, que a su vez deviene del prestigio político de quien ejerce la autoridad. El pueblo obedece pues existe el convencimiento de que las órdenes son dadas con el fin de beneficiar a todos, y no por un interés personal del gobernante de favorecerse a sí mismo o a determinados sectores. Esto le proporciona la posibilidad de ejercer el monopolio de la fuerza, ante situaciones particulares de desobediencia a las leyes.