En este primer capítulo, Iñigo, el narrador de la historia, nos cuenta como es la vida
de Diego Alatriste y Tenorio, un hombre que ni era honesto ni piadoso, pero sí un
hombre valiente, en el Madrid de aquella época. En este primer episodio nos cuenta
como Alatriste sale de la cárcel y Saldaña le encarga un trabajillo. También nos cuenta como es un día habitual en la Taberna del Turco, una taberna frecuentada por Alatriste, Iñigo, Quevedo... y algún que otro forastero.
II. LOS ENMASCARADOS.
La cita, para el trabajo que les encargo Saldaña, era a las afueras de Madrid, el lugar
tenía aspecto terrorífico, todo estaba a oscuras, solo un farolillo permitía ver algo.
Entraron en una casa por lo que parecía, abandonada, allí estaban los
hombres que les dirían que deberían de hacer, el trabajo era dejar heridos
dos hombres procedentes de Inglaterra, sería por la noche, cuando llegasen a
Madrid, todo bien, en el momento en que se fueron los hombres, apareció Emilio Bocanegra, del tribunal de la inquisición, este le dice lo contrario a lo que los primeros, terminar por completo con sus vidas.
Los encargados de asesinar a los ingleses eran dos, Alatriste y Gualterio Malatesta, un peligroso asesino italiano.
III. UNA PEQUEÑA DAMA.
Iñigo nos cuenta como transcurre su vida en el Madrid de aquella época. Principal-
Mente su vida como la de Alatriste transcurre en la Taberna del Turco, rodeado de
gente mucho más mayor que él. Un día que Iñigo miraba por la ventana, un carruaje (según él ese carruaje, transporta la cosa más bella del mundo, Angélica de Alcazar)
para, enfrente de él, a causa de una avería, momento en que unos mozalbetes tiran bolas de barro al carruaje pero Iñigo consigue espantarlos.
IV. LA EMBOSCADA.
Llegó el momento de acabar con la vida de los ingleses.
Ya entrada la noche, una tenue luz alumbraba el lugar en que sería la emboscada.
La espera se les hizo interminable, pero el momento llegó, Alatriste y Malatesta
Se lanzaron sobre los ingleses, después de unos forcejeos Malatesta fue a darle la estocada mortal a uno de ellos pero Alatriste lo impidió, salvó la vida a los ingleses. Alatriste sentía algo extraño en ellos.
V. LOS DOS INGLESES.
Alatriste se quedo en lugar de los hechos, ahora sin Malatesta, allí estaban los dos in-
gleses, tirado en el suelo. Dirigió su mirada al que se encontraba algo mejor, esta-
ba intentando ayudar, a su camarada. Alatriste decidió llevarles a casa de su buen amigo Álvaro de la Marca, de la Marca les recibió atentamente; cuando
los ingleses estaban siendo atendidos por el servicio, de la Marca contó a Alatriste
que estos ingleses eran importantes figuras de la Corona Real de Inglaterra: Jorge
Villers, marqués de Buckingham y Carlos príncipe de Gales.
VI. EL ARTE DE HACER ENEMIGOS.
Alatriste decide quedarse a dormir en casa de Álvaro de la Marca, al día siguiente,
Hablaron de lo ocurrido. Mientras tanto Iñigo se fue con la Lebrijana a ver al príncipe, a la Plaza Mayor, allí se encuentra con Angélica De Alcazar, también ve que un señor mira con cara de odio a Alatriste.
VII. LA RÚA DEL PRADO.
Era domingo, día de fiesta, también era el día en que se conocerían los dos prín-
cipes. Toda la villa de Madrid se encontraba en la Plaza.
Alatrite había pasado la noche en vela, por si le atacaban, pero no paso nada,
ocurrió al atardecer, cuando Saldaña junto 6 hombres, se llevaron a Alatriste hacia una
casa abandonada. Seguidos por Iñigo que portaba las armas de este.
VIII. EL PORTILLO DE LAS ÁNIMAS.
Alatriste entró en la casa, al llegar a una habitación pudo ver a uno de los enmas-
carados y a Fray Emilio Bocanegra. Todo estaba en silencio solo un candelabro
iluminaba la habitación. Alatriste estaba muy nervioso, por si un verdugo salía de la
nada y terminaba con su vida, pero no fue así, solo le interrogaron, nada más, le de-
jaron en libertad. A la salida de la casa hubo un enfrentamiento con gualterio Malatesta y unos rufianes, Alatriste salvó su vida gracias a Iñigo que le siguió con las armas envueltas en la capa.
IX. LAS GRADAS DE SAN FELIPE.
Madrid continuaba de fiesta y continuaría hasta que durase el noviazgo; en las
fiestas había toros, juegos de lanzas... Iñigo nos cuenta como es la vida en un
día de fiesta, donde van a conversar a contar cotilleos... etc. Allí estaban cuando
dos hombres se pusieron a vigilar los movimientos de Alatriste, mientras Iñigo,
hablaba con Angélica.
X. EL CORRAL DEL PRÍNCIPE.
Llegó el día del estreno de la obra de Lope. Alatriste como le prometió a Iñigo
le llevó a ver la obra. Había mucha gente a la entrada del corral, gente culta,
frailes, mendigos... Alatriste y Iñigo consiguieron entrar... pero no todo fue bien Alatriste fue atacado por los hombres que le vigilaban, estuvo a punto de morir cuando el príncipe de Gales y Buckinghan le salvaron de una muerte segura.
XI. EL SELLO Y LA CARTA.
Alatriste fue llevado a palacio, allí le fue entregada una caja que contenían un
sello y una carta, del príncipe de Gales, dándole las gracias por los servicios prestados y fue puesto en libertad.
RESUMEN DE CADA CAPITULOI. LA TABERNA DEL TURCO.
En este primer capítulo, Iñigo, el narrador de la historia, nos cuenta como es la vida
de Diego Alatriste y Tenorio, un hombre que ni era honesto ni piadoso, pero sí un
hombre valiente, en el Madrid de aquella época. En este primer episodio nos cuenta
como Alatriste sale de la cárcel y Saldaña le encarga un trabajillo. También nos cuenta como es un día habitual en la Taberna del Turco, una taberna frecuentada por Alatriste, Iñigo, Quevedo... y algún que otro forastero.
II. LOS ENMASCARADOS.
La cita, para el trabajo que les encargo Saldaña, era a las afueras de Madrid, el lugar
tenía aspecto terrorífico, todo estaba a oscuras, solo un farolillo permitía ver algo.
Entraron en una casa por lo que parecía, abandonada, allí estaban los
hombres que les dirían que deberían de hacer, el trabajo era dejar heridos
dos hombres procedentes de Inglaterra, sería por la noche, cuando llegasen a
Madrid, todo bien, en el momento en que se fueron los hombres, apareció Emilio Bocanegra, del tribunal de la inquisición, este le dice lo contrario a lo que los primeros, terminar por completo con sus vidas.
Los encargados de asesinar a los ingleses eran dos, Alatriste y Gualterio Malatesta, un peligroso asesino italiano.
III. UNA PEQUEÑA DAMA.
Iñigo nos cuenta como transcurre su vida en el Madrid de aquella época. Principal-
Mente su vida como la de Alatriste transcurre en la Taberna del Turco, rodeado de
gente mucho más mayor que él. Un día que Iñigo miraba por la ventana, un carruaje (según él ese carruaje, transporta la cosa más bella del mundo, Angélica de Alcazar)
para, enfrente de él, a causa de una avería, momento en que unos mozalbetes tiran bolas de barro al carruaje pero Iñigo consigue espantarlos.
IV. LA EMBOSCADA.
Llegó el momento de acabar con la vida de los ingleses.
Ya entrada la noche, una tenue luz alumbraba el lugar en que sería la emboscada.
La espera se les hizo interminable, pero el momento llegó, Alatriste y Malatesta
Se lanzaron sobre los ingleses, después de unos forcejeos Malatesta fue a darle la estocada mortal a uno de ellos pero Alatriste lo impidió, salvó la vida a los ingleses. Alatriste sentía algo extraño en ellos.
V. LOS DOS INGLESES.
Alatriste se quedo en lugar de los hechos, ahora sin Malatesta, allí estaban los dos in-
gleses, tirado en el suelo. Dirigió su mirada al que se encontraba algo mejor, esta-
ba intentando ayudar, a su camarada. Alatriste decidió llevarles a casa de su buen amigo Álvaro de la Marca, de la Marca les recibió atentamente; cuando
los ingleses estaban siendo atendidos por el servicio, de la Marca contó a Alatriste
que estos ingleses eran importantes figuras de la Corona Real de Inglaterra: Jorge
Villers, marqués de Buckingham y Carlos príncipe de Gales.
VI. EL ARTE DE HACER ENEMIGOS.
Alatriste decide quedarse a dormir en casa de Álvaro de la Marca, al día siguiente,
Hablaron de lo ocurrido. Mientras tanto Iñigo se fue con la Lebrijana a ver al príncipe, a la Plaza Mayor, allí se encuentra con Angélica De Alcazar, también ve que un señor mira con cara de odio a Alatriste.
VII. LA RÚA DEL PRADO.
Era domingo, día de fiesta, también era el día en que se conocerían los dos prín-
cipes. Toda la villa de Madrid se encontraba en la Plaza.
Alatrite había pasado la noche en vela, por si le atacaban, pero no paso nada,
ocurrió al atardecer, cuando Saldaña junto 6 hombres, se llevaron a Alatriste hacia una
casa abandonada. Seguidos por Iñigo que portaba las armas de este.
VIII. EL PORTILLO DE LAS ÁNIMAS.
Alatriste entró en la casa, al llegar a una habitación pudo ver a uno de los enmas-
carados y a Fray Emilio Bocanegra. Todo estaba en silencio solo un candelabro
iluminaba la habitación. Alatriste estaba muy nervioso, por si un verdugo salía de la
nada y terminaba con su vida, pero no fue así, solo le interrogaron, nada más, le de-
jaron en libertad. A la salida de la casa hubo un enfrentamiento con gualterio Malatesta y unos rufianes, Alatriste salvó su vida gracias a Iñigo que le siguió con las armas envueltas en la capa.
IX. LAS GRADAS DE SAN FELIPE.
Madrid continuaba de fiesta y continuaría hasta que durase el noviazgo; en las
fiestas había toros, juegos de lanzas... Iñigo nos cuenta como es la vida en un
día de fiesta, donde van a conversar a contar cotilleos... etc. Allí estaban cuando
dos hombres se pusieron a vigilar los movimientos de Alatriste, mientras Iñigo,
hablaba con Angélica.
X. EL CORRAL DEL PRÍNCIPE.
Llegó el día del estreno de la obra de Lope. Alatriste como le prometió a Iñigo
le llevó a ver la obra. Había mucha gente a la entrada del corral, gente culta,
frailes, mendigos... Alatriste y Iñigo consiguieron entrar... pero no todo fue bien Alatriste fue atacado por los hombres que le vigilaban, estuvo a punto de morir cuando el príncipe de Gales y Buckinghan le salvaron de una muerte segura.
XI. EL SELLO Y LA CARTA.
Alatriste fue llevado a palacio, allí le fue entregada una caja que contenían un
sello y una carta, del príncipe de Gales, dándole las gracias por los servicios prestados y fue puesto en libertad.