adquirir la información sobre lo ocurrido el sábado 25 de noviembre en Chiquinquirá exclusivamente atreves del alcalde para obtener las cifras oficiales se podría considerarse como un proceso de reportería
El envenenamiento en Chiquinquirá se refiere a un incidente ocurrido el sábado 25 de noviembre de 1967 en el municipio de Chiquinquirá, departamento de Boyacá, Colombia, cuando al menos 78 personas, en su mayoría niños, murieron, y alrededor de 800 resultaron intoxicadas tras desayunar pan contaminado con Folidol, un potente y tóxico plaguicida.
La tragedia inició cuando una botella de Folidol se rompió y esparció su contenido sobre varios bultos de harina que eran transportados en un camión desde Bogotá. Folidol era el nombre comercial del Paratión, un insecticida organofosforado de muy alta toxicidad que solía ser usado para controlar plagas en cultivos de algodón y papa, y que en la época era muy poco controlado por las autoridades; las botellas que iban en el camión tenían como destino el almacén de insumos agropecuarios Mi Granja, para entonces ubicado a una cuadra de la Basílica de Chiquinquirá. La harina fue comprada por la panadería Nutibara para la elaboración de pan;
La noticia del envenenamiento se propagó rápidamente por todo el país. Funcionarios del gobierno nacional, encabezados por el entonces ministro de salud Antonio Ordóñez Plaja, llegaron al mediodía al pueblo. Se sospechaba que el envenenamiento había sido producto de una contaminación del río Suárez, el cual alimenta al acueducto de Chiquinquirá, pero una prueba de cromatografía en capa fina realizada por miembros del Ministerio de Salud demostró que el pan había sido la causa de la tragedia.
El envenenamiento en Chiquinquirá se refiere a un incidente ocurrido el sábado 25 de noviembre de 1967 en el municipio de Chiquinquirá, departamento de Boyacá, Colombia, cuando al menos 78 personas, en su mayoría niños, murieron, y alrededor de 800 resultaron intoxicadas tras desayunar pan contaminado con Folidol, un potente y tóxico plaguicida.
La tragedia inició cuando una botella de Folidol se rompió y esparció su contenido sobre varios bultos de harina que eran transportados en un camión desde Bogotá. Folidol era el nombre comercial del Paratión, un insecticida organofosforado de muy alta toxicidad que solía ser usado para controlar plagas en cultivos de algodón y papa, y que en la época era muy poco controlado por las autoridades; las botellas que iban en el camión tenían como destino el almacén de insumos agropecuarios Mi Granja, para entonces ubicado a una cuadra de la Basílica de Chiquinquirá. La harina fue comprada por la panadería Nutibara para la elaboración de pan;
La noticia del envenenamiento se propagó rápidamente por todo el país. Funcionarios del gobierno nacional, encabezados por el entonces ministro de salud Antonio Ordóñez Plaja, llegaron al mediodía al pueblo. Se sospechaba que el envenenamiento había sido producto de una contaminación del río Suárez, el cual alimenta al acueducto de Chiquinquirá, pero una prueba de cromatografía en capa fina realizada por miembros del Ministerio de Salud demostró que el pan había sido la causa de la tragedia.