La Revolución científica nos indica a una fase de tiempo, comprendido entre los siglos XVI y XVII, en el que el desarrollo de campos como la física, la biología, la química, entre otros, dan lugar al nacimiento de la base de la ciencia clásica; y ello, en detrimento de las ideas predominantes establecidas por la Iglesia y la religión.
CARACTERÍSTICAS:
A muchos de estos científicos les costó la vida la defensa de sus teorías.
Desde entonces, la construcción del conocimiento ha estado basada en la observación, la experimentación y la explicación racional.
La Iglesia, a través de la Inquisición, trataba de frenar el avance de estas ciencias.
La Revolución científica, por tanto, hace referencia a un periodo de tiempo en el que, como su propio nombre indica, las ciencias juegan un papel determinante. Y es que, durante los siglos XVI y XVII, en plena Edad Moderna, el desarrollo de campos como la química, la anatomía, la astronomía, así como los citados previamente, sentó las bases de la ciencia clásica. Y todo ello, en detrimento de una Iglesia, así como de una religión, que ofrecía respuestas que quedaron obsoletas.
CONCEPTO:
La Revolución científica nos indica a una fase de tiempo, comprendido entre los siglos XVI y XVII, en el que el desarrollo de campos como la física, la biología, la química, entre otros, dan lugar al nacimiento de la base de la ciencia clásica; y ello, en detrimento de las ideas predominantes establecidas por la Iglesia y la religión.
CARACTERÍSTICAS:
La Revolución científica, por tanto, hace referencia a un periodo de tiempo en el que, como su propio nombre indica, las ciencias juegan un papel determinante. Y es que, durante los siglos XVI y XVII, en plena Edad Moderna, el desarrollo de campos como la química, la anatomía, la astronomía, así como los citados previamente, sentó las bases de la ciencia clásica. Y todo ello, en detrimento de una Iglesia, así como de una religión, que ofrecía respuestas que quedaron obsoletas.