Los primeros cristianos se dedicaban con perseverancia a la oración además de escuchar las prédicas de los apóstoles, participando en el ritual de partición del pan. Dicha práctica era realizada en compañía de María (madre de Jesús) y los familiares de esta. Los primeros creyentes se caracterizaban por su espíritu de unidad (un sólo corazón y una sóla alma) además de exhibir un alto sentido de vocación y compromiso cristiano a través de la práctica y de la fe.
Los primeros cristianos se dedicaban con perseverancia a la oración además de escuchar las prédicas de los apóstoles, participando en el ritual de partición del pan. Dicha práctica era realizada en compañía de María (madre de Jesús) y los familiares de esta. Los primeros creyentes se caracterizaban por su espíritu de unidad (un sólo corazón y una sóla alma) además de exhibir un alto sentido de vocación y compromiso cristiano a través de la práctica y de la fe.