El carbón y el petróleo son los dos combustibles fósiles más utilizados del planeta y también son las energías más contaminantes que existen. ... Además, no son energías renovables, es decir, proceden de fuentes limitadas y llegará un momento en que se agoten completamente.30
La energía nuclear tiene un potencial destructivo alto por los residuos radioactivos que genera. Estos tardan millones de años en perder su carga, lo que implica un peligro potencial para las zonas próximas.
Por otra parte, la construcción de las centrales y su funcionamiento requiere de un uso de materiales escasos. No en vano, las centrales nucleares funcionan con uranio y plutonio, que son de difícil acceso. Además, el funcionamiento es inestable y, en caso de accidentes como los de Chernóbil o Fukushima, las consecuencias en el entorno son letales.
Aunque la contaminación que genera en el momento no es de las más elevadas, es una energía que tiene una capacidad destructiva muy elevada.
2. Gas natural
El gas natural es una fuente de energía fósil y, como tal, genera residuos y emisiones contaminantes. Por otra parte, esta fuente energética es finita.
Además, hay que recordar que el gas, para su adecuado transporte y almacenamiento, hay que licuarlo. Esto implica la construcción de infraestructuras costosas que, indudablemente, tienen un impacto ecológico significativo. El resultado es que puede generar problemas importantes de salubridad en caso de fugas.
Sin embargo, es conveniente señalar que su impacto es mucho menor que el de otros combustibles fósiles como el petróleo. En los últimos años, ha ganado protagonismo en sistemas como la calefacción.
3. Energía hidroeléctrica
La energía hidroeléctrica tiene un potencial contaminante derivado de las infraestructuras necesarias para su funcionamiento. No en vano, la construcción de embalses implica anegar valles y, en ocasiones, poblaciones enteras. Además, la construcción de los depósitos libera grandes cantidades de metano.
Pero, más allá del impacto social innegable, hay que decir que también hay un impacto ecológico. En primer lugar, porque se elimina fauna y flora que se sumerge, a la vez que se alteran los ecosistemas. El segundo motivo es que la calidad de las aguas se reduce porque se contaminan. Estamos, pues, ante una fuente de energía sucia con un impacto elevado, sobre todo en el entorno.
Es importante señalar, no obstante, que esta energía tiene un nivel de emisiones bajo y, además, es renovable. Esta es la razón por la que sigue utilizándose con profusión.
Explicación:
espero y te ayude, lee y es muy fácil sacar el porque son
respuesta :
El carbón y el petróleo son los dos combustibles fósiles más utilizados del planeta y también son las energías más contaminantes que existen. ... Además, no son energías renovables, es decir, proceden de fuentes limitadas y llegará un momento en que se agoten completamente.30
Respuesta:
1. Energía nuclear
La energía nuclear tiene un potencial destructivo alto por los residuos radioactivos que genera. Estos tardan millones de años en perder su carga, lo que implica un peligro potencial para las zonas próximas.
Por otra parte, la construcción de las centrales y su funcionamiento requiere de un uso de materiales escasos. No en vano, las centrales nucleares funcionan con uranio y plutonio, que son de difícil acceso. Además, el funcionamiento es inestable y, en caso de accidentes como los de Chernóbil o Fukushima, las consecuencias en el entorno son letales.
Aunque la contaminación que genera en el momento no es de las más elevadas, es una energía que tiene una capacidad destructiva muy elevada.
2. Gas natural
El gas natural es una fuente de energía fósil y, como tal, genera residuos y emisiones contaminantes. Por otra parte, esta fuente energética es finita.
Además, hay que recordar que el gas, para su adecuado transporte y almacenamiento, hay que licuarlo. Esto implica la construcción de infraestructuras costosas que, indudablemente, tienen un impacto ecológico significativo. El resultado es que puede generar problemas importantes de salubridad en caso de fugas.
Sin embargo, es conveniente señalar que su impacto es mucho menor que el de otros combustibles fósiles como el petróleo. En los últimos años, ha ganado protagonismo en sistemas como la calefacción.
3. Energía hidroeléctrica
La energía hidroeléctrica tiene un potencial contaminante derivado de las infraestructuras necesarias para su funcionamiento. No en vano, la construcción de embalses implica anegar valles y, en ocasiones, poblaciones enteras. Además, la construcción de los depósitos libera grandes cantidades de metano.
Pero, más allá del impacto social innegable, hay que decir que también hay un impacto ecológico. En primer lugar, porque se elimina fauna y flora que se sumerge, a la vez que se alteran los ecosistemas. El segundo motivo es que la calidad de las aguas se reduce porque se contaminan. Estamos, pues, ante una fuente de energía sucia con un impacto elevado, sobre todo en el entorno.
Es importante señalar, no obstante, que esta energía tiene un nivel de emisiones bajo y, además, es renovable. Esta es la razón por la que sigue utilizándose con profusión.
Explicación:
espero y te ayude, lee y es muy fácil sacar el porque son