Caminar: Al caminar o realizar ejercicio físico, los músculos de las piernas se contraen y bombean la sangre dentro de las venas, las cuales abren las válvulas que hay en su interior y permiten que el flujo sanguíneo pueda circular en movimiento ascendente para retornar al corazón.
Nadar: Puesto que la natación es un deporte aeróbico, la contracción cardíaca aumenta su eficacia gracias al bombeo de sangre desde el corazón y facilita la distribución de oxígeno a través de los vasos sanguíneos y una mayor optimización del esfuerzo muscular.
Levantar y ejercitar las piernas: El trabajo de glúteos y piernas provoca un gran consumo calórico al tratarse de un grupo muscular grande. Activa grupos musculares del tren superior y mejora el entrenamiento del mismo. Fortalece y protege las articulaciones. Reduce el riesgo de sufrir lesiones.
Caminar: Al caminar o realizar ejercicio físico, los músculos de las piernas se contraen y bombean la sangre dentro de las venas, las cuales abren las válvulas que hay en su interior y permiten que el flujo sanguíneo pueda circular en movimiento ascendente para retornar al corazón.
Nadar: Puesto que la natación es un deporte aeróbico, la contracción cardíaca aumenta su eficacia gracias al bombeo de sangre desde el corazón y facilita la distribución de oxígeno a través de los vasos sanguíneos y una mayor optimización del esfuerzo muscular.
Levantar y ejercitar las piernas: El trabajo de glúteos y piernas provoca un gran consumo calórico al tratarse de un grupo muscular grande. Activa grupos musculares del tren superior y mejora el entrenamiento del mismo. Fortalece y protege las articulaciones. Reduce el riesgo de sufrir lesiones.