Sobre los fenómenos naturales, sobre cómo la humanidad se fue desarrollando y como fue el proceso de la tierra .
Explicación:
Para los aztecas, la humanidad vivió cuatro eras o soles que terminaron en cataclismos y renacieron en un nuevo nivel. Estos soles están representados en el calendario azteca con el siguiente orden y fechas: Sol Tigre, Sol del Viento, Sol de la Lluvia y Sol del Agua. El primero de los soles es el de la edad del frío y la noche bajo el dios Tezcatlipoca, este sol terminó en tinieblas y frío después de un eclipse; el segundo, sol del atardecer, época de magos y del dios de occidente, Quetzalcóatl, que convirtió a la humanidad en monos; el tercer sol estuvo dominado por Tláloc, dios del fuego y lluvia, y lo terminó mandando del cielo relámpagos, erupciones volcánicas y lluvia de fuego; y el cuarto, Sol de Agua, estuvo dominado por el dios Chalchiuhtlicue, que acabó el sol con inundaciones o diluvio. El quinto sol de Xiuhtecuhtli, dios del fuego, es el actual, dominado por la muerte, la resurrección y el sacrificio.
Respuesta:
Sobre los fenómenos naturales, sobre cómo la humanidad se fue desarrollando y como fue el proceso de la tierra .
Explicación:
Para los aztecas, la humanidad vivió cuatro eras o soles que terminaron en cataclismos y renacieron en un nuevo nivel. Estos soles están representados en el calendario azteca con el siguiente orden y fechas: Sol Tigre, Sol del Viento, Sol de la Lluvia y Sol del Agua. El primero de los soles es el de la edad del frío y la noche bajo el dios Tezcatlipoca, este sol terminó en tinieblas y frío después de un eclipse; el segundo, sol del atardecer, época de magos y del dios de occidente, Quetzalcóatl, que convirtió a la humanidad en monos; el tercer sol estuvo dominado por Tláloc, dios del fuego y lluvia, y lo terminó mandando del cielo relámpagos, erupciones volcánicas y lluvia de fuego; y el cuarto, Sol de Agua, estuvo dominado por el dios Chalchiuhtlicue, que acabó el sol con inundaciones o diluvio. El quinto sol de Xiuhtecuhtli, dios del fuego, es el actual, dominado por la muerte, la resurrección y el sacrificio.