Sin teléfonos inteligentes, la cantidad de imágenes que tenemos de nuestros amigos, de nuestros hijos o de nuestras mascotas descendería vertiginosamente. Esto se debe a que siempre llevamos una cámara encima y, además, somos muy conscientes de ello.
Respuesta:
Sin teléfonos inteligentes, la cantidad de imágenes que tenemos de nuestros amigos, de nuestros hijos o de nuestras mascotas descendería vertiginosamente. Esto se debe a que siempre llevamos una cámara encima y, además, somos muy conscientes de ello.
Explicación: