Ahora, podemos empezar a hablar de sus beneficios y propiedades. La Jícama es muy baja en calorías, al mismo tiempo que otorga una gran cantidad de nutrientes. Una sola de estos vegetales, brinda al cuerpo humano ¼ de lo que se necesita diariamente en fibra, pero hay que destacar que no hablamos de cualquier fibra, sino de una con alta proporción de inulina oligofructosa, fibra que tiene cero calorías y es incapaz de metabolizarse en el cuerpo. Esta fructosa es excelente para promover la salud de los huesos, al impulsar la absorción de calcio brindado por otros alimentos y actuando como un protector natural contra la osteoporosis.
Adicionalmente, la inulina es naturalmente buena para el funcionamiento del intestino, gracias a sus características probióticas que impulsan el crecimiento de la flora intestinal y las bacterias positivas en el mantenimiento del colon. Para las personas que sufren de diabetes, este vegetal puede convertirse en un aliado positivo ya que tiene un índice glicémico bastante bajo.
Ahora, estas no son las únicas propiedades de la jícama, vegetal que también posee un alto porcentaje de Vitamina C, que equivale a más del 40% recomendado por ración. Adicionalmente, según estudios efectuados en el Diario Británico de la Nutrición, por allá en el 2005, se demostró que la Jícama puede ayudar a reducir los riesgos de padecer cáncer de colon, al reducir el impacto dañino de los carcinógenos en el sistema intestinal y evitar el crecimiento y expansión del cáncer de colon a otras áreas y sistemas del cuerpo.
La Jícama también aporta una buena cantidad de fósforo, por lo que se puede combinar de manera muy positiva con ensaladas. Si se ingiere este alimento en forma de jugo o bebida, puede ayudarnos a normalizar el funcionamiento de los riñones.
Debido a su también alto aporte de Potasio, esta planta puede ayudar a reforzar nuestra salud cardiaca.
También podemos mencionar que este alimento contiene otras vitaminas, nutrientes y minerales dignos de resaltar como la tiamina, el magnesio, manganeso, ácido pantoténico, piridoxina, hierro, entre otros.
Respuesta:
Ahora, podemos empezar a hablar de sus beneficios y propiedades. La Jícama es muy baja en calorías, al mismo tiempo que otorga una gran cantidad de nutrientes. Una sola de estos vegetales, brinda al cuerpo humano ¼ de lo que se necesita diariamente en fibra, pero hay que destacar que no hablamos de cualquier fibra, sino de una con alta proporción de inulina oligofructosa, fibra que tiene cero calorías y es incapaz de metabolizarse en el cuerpo. Esta fructosa es excelente para promover la salud de los huesos, al impulsar la absorción de calcio brindado por otros alimentos y actuando como un protector natural contra la osteoporosis.
Adicionalmente, la inulina es naturalmente buena para el funcionamiento del intestino, gracias a sus características probióticas que impulsan el crecimiento de la flora intestinal y las bacterias positivas en el mantenimiento del colon. Para las personas que sufren de diabetes, este vegetal puede convertirse en un aliado positivo ya que tiene un índice glicémico bastante bajo.
Ahora, estas no son las únicas propiedades de la jícama, vegetal que también posee un alto porcentaje de Vitamina C, que equivale a más del 40% recomendado por ración. Adicionalmente, según estudios efectuados en el Diario Británico de la Nutrición, por allá en el 2005, se demostró que la Jícama puede ayudar a reducir los riesgos de padecer cáncer de colon, al reducir el impacto dañino de los carcinógenos en el sistema intestinal y evitar el crecimiento y expansión del cáncer de colon a otras áreas y sistemas del cuerpo.
La Jícama también aporta una buena cantidad de fósforo, por lo que se puede combinar de manera muy positiva con ensaladas. Si se ingiere este alimento en forma de jugo o bebida, puede ayudarnos a normalizar el funcionamiento de los riñones.
Debido a su también alto aporte de Potasio, esta planta puede ayudar a reforzar nuestra salud cardiaca.
También podemos mencionar que este alimento contiene otras vitaminas, nutrientes y minerales dignos de resaltar como la tiamina, el magnesio, manganeso, ácido pantoténico, piridoxina, hierro, entre otros.