El Contrato Dreyfus fue un acuerdo comercial firmado en París el 5 de julio de 1869 entre los representantes del Estado peruano y la Casa Dreyfus & Hnos., empresa cuyo titular era Auguste Dreyfus. Posteriormente se hicieron algunas mejoras y ampliaciones. Por medio de este contrato, la Casa Dreyfus & Hnos. se comprometía a adquirir del Estado peruano dos millones de toneladas de guano de islas, valorados en 73 millones de soles, que debía abonar a razón de 700.000 soles mensuales; al mismo tiempo se comprometía a dar al Estado un adelanto de dos millones de soles, comprometiéndose, además, a cubrir el servicio de la deuda externa peruana, que ascendía a cinco millones de soles anuales. Fue aprobado por el Gobierno el 17 de agosto de 1869, en medio de una gran polémica que dividió a la opinión pública. Por entonces gobernaba en el Perú el coronel José Balta y era ministro de HaciendaNicolás de Piérola Villena, que fue el artífice del contrato. Los consignatarios o empresarios nacionales del guano acusaron al Gobierno de “despojo” e intentaron suplantar por la vía judicial a la Casa Dreyfus. La Corte Suprema dio la razón a los consignatarios, pero el Congreso de la República zanjó finalmente la controversia, aprobando y poniendo en ejecución el contrato el 11 de noviembre de 1870.
El Contrato Dreyfus fue un acuerdo comercial firmado en París el 5 de julio de 1869 entre los representantes del Estado peruano y la Casa Dreyfus & Hnos., empresa cuyo titular era Auguste Dreyfus. Posteriormente se hicieron algunas mejoras y ampliaciones. Por medio de este contrato, la Casa Dreyfus & Hnos. se comprometía a adquirir del Estado peruano dos millones de toneladas de guano de islas, valorados en 73 millones de soles, que debía abonar a razón de 700.000 soles mensuales; al mismo tiempo se comprometía a dar al Estado un adelanto de dos millones de soles, comprometiéndose, además, a cubrir el servicio de la deuda externa peruana, que ascendía a cinco millones de soles anuales. Fue aprobado por el Gobierno el 17 de agosto de 1869, en medio de una gran polémica que dividió a la opinión pública. Por entonces gobernaba en el Perú el coronel José Balta y era ministro de HaciendaNicolás de Piérola Villena, que fue el artífice del contrato. Los consignatarios o empresarios nacionales del guano acusaron al Gobierno de “despojo” e intentaron suplantar por la vía judicial a la Casa Dreyfus. La Corte Suprema dio la razón a los consignatarios, pero el Congreso de la República zanjó finalmente la controversia, aprobando y poniendo en ejecución el contrato el 11 de noviembre de 1870.