En México se tiene una concepción especial sobre la muerte. Una calavera, lejos de desearle un mal a alguien, significa vencer el miedo ante lo finito.
Las antiguas culturas originarias de México creían que los muertos volvían un día para convivir con los vivos, comer, beber, celebrar la vida. Cuando ellos regresaban al inframundo, la comida que se les ofrecía era consumida por los familiares vivos; se creía que algo de la esencia de los parientes muertos se había quedado en dichos alimentos. En México esa tradición aún pervive.
Simbólicamente te comes a los muertos y con ello pierdes el miedo al destino fatal y puedes vivir la vida con más intensidad, pensando, precisamente, que es finita y que solamente se disfruta una vez.
En México se tiene la costumbre de regalar a los amigos y a la familia calaveras de dulce o chocolate durante la celebración de día de muertos. La calavera es para que te alimentes de la propia muerte y encuentres el dulzor de la vida. Es un símbolo alegre, divertido.
En México se tiene una concepción especial sobre la muerte. Una calavera, lejos de desearle un mal a alguien, significa vencer el miedo ante lo finito.
Las antiguas culturas originarias de México creían que los muertos volvían un día para convivir con los vivos, comer, beber, celebrar la vida. Cuando ellos regresaban al inframundo, la comida que se les ofrecía era consumida por los familiares vivos; se creía que algo de la esencia de los parientes muertos se había quedado en dichos alimentos. En México esa tradición aún pervive.
Simbólicamente te comes a los muertos y con ello pierdes el miedo al destino fatal y puedes vivir la vida con más intensidad, pensando, precisamente, que es finita y que solamente se disfruta una vez.
En México se tiene la costumbre de regalar a los amigos y a la familia calaveras de dulce o chocolate durante la celebración de día de muertos. La calavera es para que te alimentes de la propia muerte y encuentres el dulzor de la vida. Es un símbolo alegre, divertido.