l principio de su carrera política, Adolf Hitler consideraba que los asuntos económicos eran relativamente poco importantes. En 1922, Hitler afirmó que «la historia mundial nos enseña que ningún pueblo se ha convertido en grande a través de su economía, pero un pueblo puede perecer por ella» y, más tarde, concluyó que «la economía es algo de importancia secundaria».2 Hitler y los nazis tenían una concepción muy idealista de la historia, la cual sostenía que los acontecimientos humanos son guiados por un pequeño número de individuos excepcionales que siguen un ideal más alto. Creían que todas las preocupaciones económicas, al ser puramente materiales, no merecían su consideración. Hitler incluso llegó a culpar a todos los gobiernos alemanes previos desde Bismarck por su economicismo, y por haber «subyugado la nación al materialismo»,3 es decir, por haber dado primacía a los factores económicos más que a los etno-culturales o territoriales.
Respuesta:
l principio de su carrera política, Adolf Hitler consideraba que los asuntos económicos eran relativamente poco importantes. En 1922, Hitler afirmó que «la historia mundial nos enseña que ningún pueblo se ha convertido en grande a través de su economía, pero un pueblo puede perecer por ella» y, más tarde, concluyó que «la economía es algo de importancia secundaria».2 Hitler y los nazis tenían una concepción muy idealista de la historia, la cual sostenía que los acontecimientos humanos son guiados por un pequeño número de individuos excepcionales que siguen un ideal más alto. Creían que todas las preocupaciones económicas, al ser puramente materiales, no merecían su consideración. Hitler incluso llegó a culpar a todos los gobiernos alemanes previos desde Bismarck por su economicismo, y por haber «subyugado la nación al materialismo»,3 es decir, por haber dado primacía a los factores económicos más que a los etno-culturales o territoriales.
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