Si miras hacia la calle desde el lugar en el que estés te darás cuenta de que hay muchas cosas y de que pasan muchas más, pero si miras con detención verás que cada cosa tiene su individualidad: personas, árboles, perros, pájaros, entre otros, son seres realmente maravillosos y para serlo no cabe duda de que han sido creados con amor. Cuando nos ha tocado realizar algo, como, por ejemplo, un regalo para nuestras mamás en el colegio para el día de la madre, el resultado de ello es algo muy lindo, no tiene porqué ser perfecto, pero es algo muy hermoso porque ha sido pensado y creado por ti con amor, pensando en ella, en su cariño y en el amor que tiene hacia ti. Asimismo, hemos sido creados cada uno de nosotros, la naturaleza y todo lo que es parte del universo, con ese mismo amor y dedicación, como seres únicos en nuestra individualidad. Somos seres únicos e irrepetibles, pero somos iguales como hermanos y con la maravillosa posibilidad de entregar amor, recibir amor y dar vida desde el amor. Toda la naturaleza y en ella nosotros hemos nacido con la asombrosa capacidad de crecer y evolucionar, tanto física, psicológica y emocionalmente, siendo testigos y protagonistas de estos cambios en diferentes aspectos. “El amor no aparece en un momento dado de la existencia. El amor nace con nosotros. Todos nacemos como seres hechos para el amor. La prueba de que nacemos para el amor está en la necesidad que todos tenemos de superar la soledad. La necesidad del amor nace del sentimiento innato de separación y del deseo de superarlo mediante una experiencia de unión. Dicho de una forma muy sencilla: todos sentimos que nos falta algo, no sabemos qué, pero buscamos eso que nos falta.
Todos, en muchos momentos de la vida, aun estando rodeados de gente, sentimos una angustiosa sensación de soledad. Y, para huir de ella, buscamos esa mano amiga que nos haga sentir acompañados. Nos falta, como dice la sabiduría popular, nuestra «media naranja». En este sentido, somos seres iguales ante los otros teniendo una relación horizontal sin ser superiores a los demás, pero diferentes a la vez, ya que necesitamos del complemento de los demás en nuestra vida para ser felices y crecer en forma plena, no perfecta. De esta manera como seres humanos buscamos trascender, con curiosidad queremos saber, sentir y experimentar el amor. Más que creados para ser felices hemos sido creados para amar y ser amados y desde ahí construir con otros bellos momentos de felicidad y crecimiento.
1. ¿Por qué eres un ser único e irrepetible?
2. ¿De qué formas te has sentido amado por los demás?
3. ¿De qué manera has entregado amor a los demás?
Respuesta:
1 porque Dios me creo a su imagen y semejansa Poseemos capacidades físicas y mentales tan
perfectas que ni siquiera los grandes adelantos tecnológicos han podido igualarla
2 cuando alguien muestra afecto por mi cuando me ayudan en mis dificultades. cuando me alientan a seguir a perseverar a alcanzar mis metas a corregir mi errores.
3 cuando he Sido solidario. cuando ayudo al necesitado cuando oramos y visitamos a los enfermos cuando doy si esperar nada a cambio .