Resumen para niños facil de entender sobre la vida de San José
lizmontoya25
Nazaret (heb.יוֹסֵף) fue, según la religión cristiana, el esposo de María, la madre de Jesús de Nazaret y, por tanto, padre terrenal de Jesús. Era de oficio carpintero, profesión que enseñó a su Hijo y de extracción humilde, aunque las genealogías de Mateo 1:1-17 y Lucas 3:23-38, lo hacen descendiente del Rey David. Se ignora la fecha de su muerte (tradicionalmente, se acepta que murió cuando Jesucristo tenía más de 12 años), pero no está presente en el relato evangélico de la predicación de Jesús, por lo que se presume que murió antes de que esta tuviera lugar.
El evangelio de Mateo 1:18-24 parte del drama que vivió al saber que María estaba embarazada. Iba a repudiarla, en secreto porque era justo, la amaba y no quería que fuera apedreada según lo dispuesto en la Ley (Deuteronomio 22:21). El Ángel del Señor le manifiesta que ella concibió por obra del Espíritu Santo y que su hijo salvará a su pueblo, por lo que José acepta a María.
Luego cuando Herodes ordena matar a los bebés de Belén, para salvar al Niño Jesús, se desplaza con su familia hasta Egipto. Al morir Herodes regresa, pero no se establece en Judea por miedo a Arquelao, el hijo de Herodes y decide esconder a la familia en Nazaret (Mateo 2:13-23), lugar que según recientes descubrimientos arqueológicos era entonces una pequeña aldea con casas muy humildes adyacentes a cuevas rocosas y donde antes vivía María, según Lucas 1:26-32.
San José se halla representado desde el siglo III en algunos relieves de sarcófagos, siempre junto a la Virgen María llevando ordinariamente como distintivo un bastón encorvado o un instrumento de su oficio.
En el sarcófago de San Celso en Milán de finales del siglo IV aparece con una destral o hacha. En un díptico de la catedral de dicha ciudad, con una sierra (siglo VI). En un mosaico de Santa María la Mayor del siglo V empieza a llevar la vara florida con que se dibujará de ahí en adelante. En la pila bautismal de San Isidoro de León tiene un báculo en forma de T y un libro. Hasta el siglo V siempre se le da un aspecto joven y hasta el siglo XIII nunca figura aislado o fuera de escena.
Por la fidelidad a su esposa, con la que según la Iglesia Católica no consumó el matrimonio, debido a que María estaba profundamente entregada al amor de su padre divino (aún siendo verdadero esposo virginal), San José recibió el don divino de la paternidad, de ahí su dignidad y santidad. San José fue declarado patrono de la familia. El Papa Pío IX lo proclamó patrono de la Iglesia universal en 1870. Debido a su trabajo de carpintero es considerado patrono del trabajo, especialmente de los obreros. La Iglesia Católica lo ha declarado también protector contra la duda y en 1920 el Papa Benedicto XV lo declaró además patrono contra el comunismo y la relajación moral. En 1989 el papa Juan Pablo II le dedicó una exhortación apostólica: "Redemptoris Custos". Ha sido proclamado patrono de América, China, Canadá, Corea, México, Austria, Bélgica, Bohemia, Croacia, Perú, Vietnam
El evangelio de Mateo 1:18-24 parte del drama que vivió al saber que María estaba embarazada. Iba a repudiarla, en secreto porque era justo, la amaba y no quería que fuera apedreada según lo dispuesto en la Ley (Deuteronomio 22:21). El Ángel del Señor le manifiesta que ella concibió por obra del Espíritu Santo y que su hijo salvará a su pueblo, por lo que José acepta a María.
Luego cuando Herodes ordena matar a los bebés de Belén, para salvar al Niño Jesús, se desplaza con su familia hasta Egipto. Al morir Herodes regresa, pero no se establece en Judea por miedo a Arquelao, el hijo de Herodes y decide esconder a la familia en Nazaret (Mateo 2:13-23), lugar que según recientes descubrimientos arqueológicos era entonces una pequeña aldea con casas muy humildes adyacentes a cuevas rocosas y donde antes vivía María, según Lucas 1:26-32.
San José se halla representado desde el siglo III en algunos relieves de sarcófagos, siempre junto a la Virgen María llevando ordinariamente como distintivo un bastón encorvado o un instrumento de su oficio.
En el sarcófago de San Celso en Milán de finales del siglo IV aparece con una destral o hacha.
En un díptico de la catedral de dicha ciudad, con una sierra (siglo VI).
En un mosaico de Santa María la Mayor del siglo V empieza a llevar la vara florida con que se dibujará de ahí en adelante.
En la pila bautismal de San Isidoro de León tiene un báculo en forma de T y un libro.
Hasta el siglo V siempre se le da un aspecto joven y hasta el siglo XIII nunca figura aislado o fuera de escena.
Por la fidelidad a su esposa, con la que según la Iglesia Católica no consumó el matrimonio, debido a que María estaba profundamente entregada al amor de su padre divino (aún siendo verdadero esposo virginal), San José recibió el don divino de la paternidad, de ahí su dignidad y santidad. San José fue declarado patrono de la familia. El Papa Pío IX lo proclamó patrono de la Iglesia universal en 1870. Debido a su trabajo de carpintero es considerado patrono del trabajo, especialmente de los obreros. La Iglesia Católica lo ha declarado también protector contra la duda y en 1920 el Papa Benedicto XV lo declaró además patrono contra el comunismo y la relajación moral. En 1989 el papa Juan Pablo II le dedicó una exhortación apostólica: "Redemptoris Custos". Ha sido proclamado patrono de América, China, Canadá, Corea, México, Austria, Bélgica, Bohemia, Croacia, Perú, Vietnam