Había una vez un hombre que trabajaba como picapedrero. Cada día iba a una vasta zona rocosa en la ladera de una gran montaña y cortaba trozos de piedra para fabricar tumbas o casas. Conocía bien los distintos tipos de piedras y sabía distinguir las que servían para cada diferente propósito.
Respuesta:
Había una vez un hombre que trabajaba como picapedrero. Cada día iba a una vasta zona rocosa en la ladera de una gran montaña y cortaba trozos de piedra para fabricar tumbas o casas. Conocía bien los distintos tipos de piedras y sabía distinguir las que servían para cada diferente propósito.
Explicación:
Respuesta:
EL PICAPEDRERO
Cuento tradicional chino
Había una vez un hombre que trabajaba como
picapedrero. Cada día iba a una vasta zona rocosa
en la ladera de una gran montaña y cortaba trozos
de piedra para fabricar tumbas o casas. Conocía
bien los distintos tipos de piedras y sabía
distinguir las que servían para cada diferente
propósito. Como era trabajador y cuidadoso, tenía
muchos clientes.
Durante mucho tiempo se sintió conforme y feliz
y no pretendía otra cosa distinta a la que tenía.
En la montaña vivía un espíritu que de tanto en
tanto se les aparecía a los hombres y de diversas
maneras los ayudaba a enriquecerse y prosperar.
El picapedrero nunca lo había visto y cuando
alguien le hablaba del espíritu, sacudía la cabeza
con aire de incredulidad. No obstante, llegaría un
momento en que cambiaría de opinión.