2005gomezsaavedra
Relata un episodio de la vida de alguien salido de esa parte de la ciudad que los blancos ricos de Memphis, Tennessee, Estados Unidos, no ven. Nunca la visitan. Se trata de un personaje de la vida real: Michael Oher, jugador de fútbol americano negro nacido en la pobreza y sin hogar, cuya madre era adicta al crack, y que fue acogido como un hijo a los dieciocho años de edad por una familia blanca.
Pero no se trata propiamente de una ceguera social que impida ver a los pobres. En la parte oculta de la ciudad de The Blind Side no hay una sociedad invisible. Los blancos parecen tener la razón al no dirigir su mirada hacia allí porque lo único que se muestra en la película es degradación por la droga, el crimen y la pobreza. Allí no hay nada que valga la pena ver. Si Michael Oher se salva de ese infierno es porque él también se hacía el ciego: su madre le pedía que cerrara los ojos para que no la viera cuando se drogaba.
La caridad y al amor de madre que impulsan a la escuela y a la familia cristianas a rescatar a Oher tienen así como correlato la concepción agustiniana del mal como defecto, privación; como no ser, en síntesis. El nombre del barrio del que proviene el muchacho es ilustrativo: Hurt Village, "ciudad herida". La manera como se introduce el personaje en la vida de la familia también. Michael Oher surge de la oscuridad de una noche fría y neblinosa. Parece que saliera de la nada, y es una figura difusa que va adquiriendo definición poco a poco, a pesar de su enorme tamaño.
Pero no se trata propiamente de una ceguera social que impida ver a los pobres. En la parte oculta de la ciudad de The Blind Side no hay una sociedad invisible. Los blancos parecen tener la razón al no dirigir su mirada hacia allí porque lo único que se muestra en la película es degradación por la droga, el crimen y la pobreza. Allí no hay nada que valga la pena ver. Si Michael Oher se salva de ese infierno es porque él también se hacía el ciego: su madre le pedía que cerrara los ojos para que no la viera cuando se drogaba.
La caridad y al amor de madre que impulsan a la escuela y a la familia cristianas a rescatar a Oher tienen así como correlato la concepción agustiniana del mal como defecto, privación; como no ser, en síntesis. El nombre del barrio del que proviene el muchacho es ilustrativo: Hurt Village, "ciudad herida". La manera como se introduce el personaje en la vida de la familia también. Michael Oher surge de la oscuridad de una noche fría y neblinosa. Parece que saliera de la nada, y es una figura difusa que va adquiriendo definición poco a poco, a pesar de su enorme tamaño.