Los bosques de pino Paraná (Araucaria angustifolia) dominan el paisaje. Otrora ocuparon una vasta extensión, que en nuestro país superaba las 200.000 hectáreas en el noreste de la provincia de Misiones. Hoy sólo quedan 1.000 ha de este bosque (menos del 1 % de la superficie original), dividido en varios sitios. Casi la mitad de esa superficie, corresponde a la Reserva Natural Estricta San Antonio.
Debajo del dosel que integran los árboles más altos, donde sobresalen las copas aparasoladas de las araucarias, hay árboles de alturas intermedias, entre los cuales se destaca por su valor cultural, el de yerba mate (Ilex paraguarienses).
Además, enormes helechos arborescentes como el chachí manso (Dicksonia sellowiana), acompañan las costas de los arroyos. Y junto a orquídeas y bromelias, nos recuerdan que estamos en la Selva Paranaense.
Fauna
En cuanto a la fauna, hay un pájaro característico de los pinares, el coludito de los pinos (Leptasthenura setaria), fácil de distinguir en lo alto de las copas. Más difíciles de ver aunque todavía presentes son la urraca azul y el loro pecho vinoso, amenazado de extinción.
Lamentablemente otras especies ligadas a los pinares, lógicamente han ido desapareciendo junto a ellos. Es el caso, dentro de la Reserva, del loro denominado charao (Amazona pretrei) y un mono, el aullador rojo (Alouatta fusca)
Los bosques de pino Paraná (Araucaria angustifolia) dominan el paisaje. Otrora ocuparon una vasta extensión, que en nuestro país superaba las 200.000 hectáreas en el noreste de la provincia de Misiones. Hoy sólo quedan 1.000 ha de este bosque (menos del 1 % de la superficie original), dividido en varios sitios. Casi la mitad de esa superficie, corresponde a la Reserva Natural Estricta San Antonio.
Debajo del dosel que integran los árboles más altos, donde sobresalen las copas aparasoladas de las araucarias, hay árboles de alturas intermedias, entre los cuales se destaca por su valor cultural, el de yerba mate (Ilex paraguarienses).
Además, enormes helechos arborescentes como el chachí manso (Dicksonia sellowiana), acompañan las costas de los arroyos. Y junto a orquídeas y bromelias, nos recuerdan que estamos en la Selva Paranaense.
FaunaEn cuanto a la fauna, hay un pájaro característico de los pinares, el coludito de los pinos (Leptasthenura setaria), fácil de distinguir en lo alto de las copas. Más difíciles de ver aunque todavía presentes son la urraca azul y el loro pecho vinoso, amenazado de extinción.
Lamentablemente otras especies ligadas a los pinares, lógicamente han ido desapareciendo junto a ellos. Es el caso, dentro de la Reserva, del loro denominado charao (Amazona pretrei) y un mono, el aullador rojo (Alouatta fusca)