En los estados republicanos se han dividido en tres niveles de administración o gestión conocidos como el Local, el Estadal y el Nacional y para cada uno de ellos se tienen separados los poderes públicos, es decir, el Ejecutivo y el Legislativo y en algunos países el Judicial.
Cada poder público tiene bien definidas sus funciones y atribuciones o competencias en cualquiera de los niveles mencionados.
Usualmente los poderes Ejecutivo y Legislativo son elegidos de manera democrático mediante el voto directo y secreto de los electores conociéndose esto como elección de primer grado y frecuentemente el poder judicial es elegido por el Poder Legislativo mediante una elección de segundo grado, en base a una terna de candidatos que deben cumplir los requisitos exigidos en las normas específicas.
Ahora bien, a nivel Nacional el Poder Ejecutivo es el encargado constitucionalmente de diseñar e implementar las políticas públicas necesarias y pertinentes para conducir el destino de la nación y de sus habitantes.
También debe tomar decisiones de Estado y asumir las responsabilidades de sus actos, además de recaudar los impuestos y de administrar la hacienda pública nacional, está sujeto al control de los demás poderes públicos.
La Seguridad y Defensa Nacional, los cuerpos militares y policiales son de su competencia, así como la Protección Civil, la salud y la red de asistencia pública, entre muchos otras.
Las obras de construcción de utilidad pública deben ser presupuestadas, contratadas y supervisadas por el Ejecutivo Nacional.
El Poder Legislativo Nacional se enfoca en la creación, modificación y mejoramiento de las leyes nacionales, así como de ejercer funciones de control de los demás poderes públicos y de aprobar los endeudamientos de la nación.
El Poder Judicial es el encargado de todo lo relacionado con la justa y correcta administración de la justicia y de la interpretación y aplicación de las leyes.
Todos los poderes en conjunto coadyuvan en la administración y control del Estado.
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superg82k7
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PODERES PÚBLICOS.
En los estados republicanos se han dividido en tres niveles de administración o gestión conocidos como el Local, el Estadal y el Nacional y para cada uno de ellos se tienen separados los poderes públicos, es decir, el Ejecutivo y el Legislativo y en algunos países el Judicial.
Cada poder público tiene bien definidas sus funciones y atribuciones o competencias en cualquiera de los niveles mencionados.
Usualmente los poderes Ejecutivo y Legislativo son elegidos de manera democrático mediante el voto directo y secreto de los electores conociéndose esto como elección de primer grado y frecuentemente el poder judicial es elegido por el Poder Legislativo mediante una elección de segundo grado, en base a una terna de candidatos que deben cumplir los requisitos exigidos en las normas específicas.
Ahora bien, a nivel Nacional el Poder Ejecutivo es el encargado constitucionalmente de diseñar e implementar las políticas públicas necesarias y pertinentes para conducir el destino de la nación y de sus habitantes.
También debe tomar decisiones de Estado y asumir las responsabilidades de sus actos, además de recaudar los impuestos y de administrar la hacienda pública nacional, está sujeto al control de los demás poderes públicos.
La Seguridad y Defensa Nacional, los cuerpos militares y policiales son de su competencia, así como la Protección Civil, la salud y la red de asistencia pública, entre muchos otras.
Las obras de construcción de utilidad pública deben ser presupuestadas, contratadas y supervisadas por el Ejecutivo Nacional.
El Poder Legislativo Nacional se enfoca en la creación, modificación y mejoramiento de las leyes nacionales, así como de ejercer funciones de control de los demás poderes públicos y de aprobar los endeudamientos de la nación.
El Poder Judicial es el encargado de todo lo relacionado con la justa y correcta administración de la justicia y de la interpretación y aplicación de las leyes.
Todos los poderes en conjunto coadyuvan en la administración y control del Estado.