srtabukowski112 Debido a las condiciones extremas del clima, en la Antártida existe poca vegetación, y de formas muy simples, como algas, musgos (como el Saniania uncinata), y líquenes (como el Xantonia elegans), sin embargo la zona costera septentrional de la Península Antártica y las Antillas del Sur poseen dos plantas autóctonas vasculares y fanerógamas: el clavel antártico (Colobanthus quitensis) y el pasto antártico (Deschampsia antarctica); ambas plantas crecen formando tundras y (en las zonas más septentrionales de las islas) pequeños colchones de tussoks; la Deschampia antarctica se destaca por su resistencia a las radiaciones ultravioletas y, por los compuestos que sintetiza se estudia su uso terapéutico para distintos tipos de cáncer de piel. Aparte de la flora vegetal, que prospera principalmente en las islas y en las costas de la dicha península, también se pueden encontrar en la misma zona antártica especies del filo hongo (Deschapmsia, Cephalosporium balanoides, Acrostalagnus etc.). La Antártida tiene una característica muy especial: las flores de hielo. Estas se forman sobre capas de hielo marino, a partir de vapores de agua que se escapan de las fisuras y huecos en la capa de hielo superficial. Al entrar en contacto con el aire frío estos vapores se congelan, y la sal en la superficie comienza a cristalizar, sirviendo de núcleo para que comience a formarse la flor. Flora El antártico consta de tres ambientes: la atmósfera, el continente cubierto de hielo y el mar.
La flora es muy pobre sobre el continente y está representada por líquenes, musgos y como excepción algún ejemplar de planta superior.
Las pocas plantas que sobreviven en este continente están restringidas a pequeñas áreas sin hielo. No hay árboles y la vegetación se limita a 350 especies, sobre todo líquenes, musgos y algas. Hay ricos lechos de tal vegetación en partes de la península, y se han descubierto líquenes en crecimiento en montañas aisladas a 475 km del polo sur.
Hay tres especies de plantas con flores en la península. Se observan matas de clavelillo, líquenes, hongos de sombrerito, hepáticas, algas microscópicas y plancton
Debido a las condiciones extremas del clima, existe poca vegetación.
Las formas son muy simples como algas, musgos y líquenes, sin embargo la zona costera septentrional de la Península Antártica y las Antillas del Sur poseen dos plantas autóctonas: el clavel antártico y el pasto antártico); ambas plantas crecen formando tundras
Aparte de la flora vegetal, que prospera principalmente en las islas y en las costas de la dicha península, también se pueden encontrar en la misma zona antártica especies del filo hongo.
En la Antártida tiene una característica muy especial: las flores de hielo. Estas se forman sobre capas de hielo marino, a partir de vapores de agua que se escapan de las fisuras y huecos en la capa de hielo superficial. Al entrar en contacto con el aire frío estos vapores se congelan, y la sal en la superficie comienza a cristalizar, sirviendo de núcleo para que comience a formarse la flor.
Las pocas plantas que sobreviven en este continente están restringidas a pequeñas áreas sin hielo.
No hay árboles y la vegetación se limita a 350 especies, sobre todo líquenes, musgos y algas. Hay ricos lechos de tal vegetación en partes de la península, y se han descubierto líquenes en crecimiento en montañas aisladas a 475 km del polo sur.
Hay tres especies de plantas con flores en la península. Se observan matas de clavelillo, líquenes, hongos de sombrerito, hepáticas, algas microscópicas y plancton
Aparte de la flora vegetal, que prospera principalmente en las islas y en las costas de la dicha península, también se pueden encontrar en la misma zona antártica especies del filo hongo (Deschapmsia, Cephalosporium balanoides, Acrostalagnus etc.).
La Antártida tiene una característica muy especial: las flores de hielo. Estas se forman sobre capas de hielo marino, a partir de vapores de agua que se escapan de las fisuras y huecos en la capa de hielo superficial. Al entrar en contacto con el aire frío estos vapores se congelan, y la sal en la superficie comienza a cristalizar, sirviendo de núcleo para que comience a formarse la flor.
Flora
El antártico consta de tres ambientes: la atmósfera, el continente cubierto de hielo y el mar.
La flora es muy pobre sobre el continente y está representada por líquenes, musgos y como excepción algún ejemplar de planta superior.
Las pocas plantas que sobreviven en este continente están restringidas a pequeñas áreas sin hielo.
No hay árboles y la vegetación se limita a 350 especies, sobre todo líquenes, musgos y algas.
Hay ricos lechos de tal vegetación en partes de la península, y se han descubierto líquenes en crecimiento en montañas aisladas a 475 km del polo sur.
Hay tres especies de plantas con flores en la península. Se observan matas de clavelillo, líquenes, hongos de sombrerito, hepáticas, algas microscópicas y plancton
Debido a las condiciones extremas del clima, existe poca vegetación.
Las formas son muy simples como algas, musgos y líquenes, sin embargo la zona costera septentrional de la Península Antártica y las Antillas del Sur poseen dos plantas autóctonas: el clavel antártico y el pasto antártico); ambas plantas crecen formando tundras
Aparte de la flora vegetal, que prospera principalmente en las islas y en las costas de la dicha península, también se pueden encontrar en la misma zona antártica especies del filo hongo.
En la Antártida tiene una característica muy especial: las flores de hielo. Estas se forman sobre capas de hielo marino, a partir de vapores de agua que se escapan de las fisuras y huecos en la capa de hielo superficial. Al entrar en contacto con el aire frío estos vapores se congelan, y la sal en la superficie comienza a cristalizar, sirviendo de núcleo para que comience a formarse la flor.
Las pocas plantas que sobreviven en este continente están restringidas a pequeñas áreas sin hielo.
No hay árboles y la vegetación se limita a 350 especies, sobre todo líquenes, musgos y algas.
Hay ricos lechos de tal vegetación en partes de la península, y se han descubierto líquenes en crecimiento en montañas aisladas a 475 km del polo sur.
Hay tres especies de plantas con flores en la península. Se observan matas de clavelillo, líquenes, hongos de sombrerito, hepáticas, algas microscópicas y plancton