El eje de la Tierra señala siempre en la misma dirección, a pesar de que el planeta gira alrededor del Sol. Esta inclinación y el movimiento de traslación son la causa de que los dos hemisferios miren hacia el Sol, en forma alternada, originando el verano, el invierno, el otoño y la primavera.
La traslación de la Tierra es uno de los movimientos que realiza el planeta y consiste en dar la vuelta alrededor del Sol. Tarda 365 días y 6 horas en completar el trayecto. Cada cuatro años, esas horas se suman y dan un total de 24 horas. Esa la razón por la que, cada cuatro años, contamos con un año bisiesto en nuestro calendario, en el que el mes de febrero tiene un día más.
El movimiento de traslación ocurre en la órbita terrestre y alcanza un recorrido de 930 millones de kilómetros. Si bien la distancia promedio entre la Tierra y el Sol es de 150 millones de kilómetros, la órbita en forma de elipse u óvalo genera que, en algunos tramos, la Tierra se encuentre más cerca del Sol y en otros, más alejada. Esas distancias provocan diferencias climáticas sobre el planeta que dan origen a las estaciones del año.
Respuesta:
El eje de la Tierra señala siempre en la misma dirección, a pesar de que el planeta gira alrededor del Sol. Esta inclinación y el movimiento de traslación son la causa de que los dos hemisferios miren hacia el Sol, en forma alternada, originando el verano, el invierno, el otoño y la primavera.
Explicación:
Respuesta:
La traslación de la Tierra es uno de los movimientos que realiza el planeta y consiste en dar la vuelta alrededor del Sol. Tarda 365 días y 6 horas en completar el trayecto. Cada cuatro años, esas horas se suman y dan un total de 24 horas. Esa la razón por la que, cada cuatro años, contamos con un año bisiesto en nuestro calendario, en el que el mes de febrero tiene un día más.
El movimiento de traslación ocurre en la órbita terrestre y alcanza un recorrido de 930 millones de kilómetros. Si bien la distancia promedio entre la Tierra y el Sol es de 150 millones de kilómetros, la órbita en forma de elipse u óvalo genera que, en algunos tramos, la Tierra se encuentre más cerca del Sol y en otros, más alejada. Esas distancias provocan diferencias climáticas sobre el planeta que dan origen a las estaciones del año.