La religión infunde la responsabilidad social y el hacer convenios en nuestras vidas, no basándose en los intereses personales, sino como una promesa hecha a Dios. Este acto de “atar” es una de la peculiaridades en la historia que sobrepasa las obligaciones sociales más allá de la familia o de la tribu
Respuesta:
La religión infunde la responsabilidad social y el hacer convenios en nuestras vidas, no basándose en los intereses personales, sino como una promesa hecha a Dios. Este acto de “atar” es una de la peculiaridades en la historia que sobrepasa las obligaciones sociales más allá de la familia o de la tribu