Palabras clave: ciencia, política, fuga de cerebros, exilio, repatriación
Introducción
La fuga de cerebros ocupa en el imaginario colectivo un lugar especial, casi mítico, que obliga a preguntarse respecto de su especificidad real e histórica. En las décadas de 1960 y 1970, el “brain drain” apareció vinculado con las condiciones de posibilidad del desarrollo económico en las agendas de las políticas públicas en América Latina.
Este trabajo intenta reflexionar acerca del exilio, la fuga de cerebros y la repatriación en el período comprendido entre los años 1960 y el presente, o entre la denominada “Noche de los Bastones Largos” y la creación del Programa Raíces del Mincyt. Se aspira a revisar modelos de ciencia y modelos de país que tuvieron lugar entre 1960 y el presente: un modelo de ciencia para el desarrollo en un país dependiente de otro modelo de ciencia para la innovación en un mundo globalizado, “políticas de expulsión” frente a “políticas de repatriación”.
Considerando la relación entre exilio y ciencia como una relación fundamentalmente política, se presupone que: 1) la gestión del Estado en las políticas científicas y tecnológicas, por acción o por omisión, resultó un factor importante en el exilio y repatriación de los científicos, técnicos y profesionales; 2) al derrotero político-institucional y económico-social de la historia argentina, marcado especialmente por la alternancia entre dictaduras y democracia, se agrega el propio derrotero de la ciencia, cuyo debate se dirime entre el modelo universalista y antiuniversalistas, entre el cientificismo y el anticientificismo, entre ciencia básica y ciencia aplicada; 3) la producción y aplicación de conocimientos ha cambiado históricamente por razones científicas y extracientíficas
Respuesta:
Palabras clave: ciencia, política, fuga de cerebros, exilio, repatriación
Introducción
La fuga de cerebros ocupa en el imaginario colectivo un lugar especial, casi mítico, que obliga a preguntarse respecto de su especificidad real e histórica. En las décadas de 1960 y 1970, el “brain drain” apareció vinculado con las condiciones de posibilidad del desarrollo económico en las agendas de las políticas públicas en América Latina.
Este trabajo intenta reflexionar acerca del exilio, la fuga de cerebros y la repatriación en el período comprendido entre los años 1960 y el presente, o entre la denominada “Noche de los Bastones Largos” y la creación del Programa Raíces del Mincyt. Se aspira a revisar modelos de ciencia y modelos de país que tuvieron lugar entre 1960 y el presente: un modelo de ciencia para el desarrollo en un país dependiente de otro modelo de ciencia para la innovación en un mundo globalizado, “políticas de expulsión” frente a “políticas de repatriación”.
Considerando la relación entre exilio y ciencia como una relación fundamentalmente política, se presupone que: 1) la gestión del Estado en las políticas científicas y tecnológicas, por acción o por omisión, resultó un factor importante en el exilio y repatriación de los científicos, técnicos y profesionales; 2) al derrotero político-institucional y económico-social de la historia argentina, marcado especialmente por la alternancia entre dictaduras y democracia, se agrega el propio derrotero de la ciencia, cuyo debate se dirime entre el modelo universalista y antiuniversalistas, entre el cientificismo y el anticientificismo, entre ciencia básica y ciencia aplicada; 3) la producción y aplicación de conocimientos ha cambiado históricamente por razones científicas y extracientíficas
nose si es eso