EL CRECIMIENTO ECONÓMICO DE LAS CIUDADES ITALIANAS:
En el siglo XV, cinco grandes fuerzas dominaron la península itálica: Milán, Venecia, Florencia, los Estados Pontificios y Nápoles, los cinco estados principales El norte de Italia estaba dividido entre el ducado de Milán y Venecia. Tras la muerte del último visconte gobernante de Milán, ocurrida en 1447, Francesco Sforza, uno de los líderes condottierí de su tiempo, incitó a sus empleados milaneses a conquistar la ciudad y se convirtió en su nuevo duque. Tanto los Visconti como los Sforza se empeñaron en crear un estado territorial altamente centralizado.
Tuvieron especial éxito en implantar sistemas de recaudación fiscal que generaron enormes ingresos para el gobierno. La república marítima de Venecia siguió siendo una entidad política estable, gobernada por una pequeña oligarquía de aristócratas-mercaderes. Su imperio comercial produjo enormes ingresos y le ganó el papel de una potencia internacional.
A finales del siglo XIV Venecia se embarcó en la conquista de un estado territorial en la región norte de Italia, con el fin de proteger su suministro de alimentos y sus rutas comerciales por tierra. Aunque la expansión de su territorio principal tenía sentido para los venecianos, preocupó a Milán y Florencia, que se empeñaron en detener lo que consideraban designios imperialistas de los venecianos.
La república de Florencia dominó la región de Toscana. A principios del siglo XV estaba gobernada por una pequeña oligarquía mercantil que manipulaba al gobierno aparentemente republicano. En 1434 Cósimo de Médici tomó control de esta oligarquía. Aunque la acaudalada familia Médici conservó las formas republicanas de gobierno en aras de la apariencia, controlaba al gobierno tras bambalinas. Mediante su pródigo patronazgo y el cuidadoso cortejo de los aliados políticos, Cósimo (1434-1464) y más tarde su nieto Lorenzo el Magnífico (1469-1492) tuvieron éxito en controlar la ciudad, en una época en que Florencia era el centro del renacimiento cultural.
Los estados papales estaban situados en el centro de Italia. Aunque nominalmente estaban bajo el control político de los papas, el periodo de residencia papal en Aviñón y el gran cisma posibilita- ron que ciudades y territorios individuales —como Urbino, Bolonia y Ferrara— se independizaran de la autoridad papal. Los papas del Renacimiento del siglo XV invirtieron gran parte de su energía en el restablecimiento de su control sobre los Estados Pontificios (véase el apartado El papado renacentista más adelante en este capítulo).
El reino de Nápoles, que abarcaba la mayor parte del sur de Italia y, usualmente, la isla de Sicilia, fue motivo de disputa entre franceses y aragoneses hasta que estos últimos establecieron su dominio a mediados del siglo XV.
En todo el Renacimiento, el reino de Nápoles siguió siendo, en gran medida, una monarquía feudal con una población que consistía, sobre todo, en campesinos agobiados por la pobreza y dominados por nobles indóciles. Tuvo poca participación en las glorias culturales del Renacimiento.
EL CRECIMIENTO ECONÓMICO DE LAS CIUDADES ITALIANAS:
En el siglo XV, cinco grandes fuerzas dominaron la península itálica: Milán, Venecia, Florencia, los Estados Pontificios y Nápoles, los cinco estados principales El norte de Italia estaba dividido entre el ducado de Milán y Venecia. Tras la muerte del último visconte gobernante de Milán, ocurrida en 1447, Francesco Sforza, uno de los líderes condottierí de su tiempo, incitó a sus empleados milaneses a conquistar la ciudad y se convirtió en su nuevo duque. Tanto los Visconti como los Sforza se empeñaron en crear un estado territorial altamente centralizado.
Tuvieron especial éxito en implantar sistemas de recaudación fiscal que generaron enormes ingresos para el gobierno. La república marítima de Venecia siguió siendo una entidad política estable, gobernada por una pequeña oligarquía de aristócratas-mercaderes. Su imperio comercial produjo enormes ingresos y le ganó el papel de una potencia internacional.
A finales del siglo XIV Venecia se embarcó en la conquista de un estado territorial en la región norte de Italia, con el fin de proteger su suministro de alimentos y sus rutas comerciales por tierra. Aunque la expansión de su territorio principal tenía sentido para los venecianos, preocupó a Milán y Florencia, que se empeñaron en detener lo que consideraban designios imperialistas de los venecianos.
La república de Florencia dominó la región de Toscana. A principios del siglo XV estaba gobernada por una pequeña oligarquía mercantil que manipulaba al gobierno aparentemente republicano. En 1434 Cósimo de Médici tomó control de esta oligarquía. Aunque la acaudalada familia Médici conservó las formas republicanas de gobierno en aras de la apariencia, controlaba al gobierno tras bambalinas. Mediante su pródigo patronazgo y el cuidadoso cortejo de los aliados políticos, Cósimo (1434-1464) y más tarde su nieto Lorenzo el Magnífico (1469-1492) tuvieron éxito en controlar la ciudad, en una época en que Florencia era el centro del renacimiento cultural.
Los estados papales estaban situados en el centro de Italia. Aunque nominalmente estaban bajo el control político de los papas, el periodo de residencia papal en Aviñón y el gran cisma posibilita- ron que ciudades y territorios individuales —como Urbino, Bolonia y Ferrara— se independizaran de la autoridad papal. Los papas del Renacimiento del siglo XV invirtieron gran parte de su energía en el restablecimiento de su control sobre los Estados Pontificios (véase el apartado El papado renacentista más adelante en este capítulo).
El reino de Nápoles, que abarcaba la mayor parte del sur de Italia y, usualmente, la isla de Sicilia, fue motivo de disputa entre franceses y aragoneses hasta que estos últimos establecieron su dominio a mediados del siglo XV.
En todo el Renacimiento, el reino de Nápoles siguió siendo, en gran medida, una monarquía feudal con una población que consistía, sobre todo, en campesinos agobiados por la pobreza y dominados por nobles indóciles. Tuvo poca participación en las glorias culturales del Renacimiento.