Para ello se retoma el concepto de base socio-técnica de la industria: la reestructuración productiva se concibe, entonces, como el cambio cualitativo de la misma, esto es, como un cambio tecnológico, de la organización del trabajo, de las relaciones laborales y del perfil de la fuerza de trabajo. Este cambio a nivel microeconómico tiene su expresión macro directa en el cambio en el proceso de industrialización, esto es, en el tránsito de una industria que se forma a partir de la substitución de importaciones y se organiza sobre una base nacional, a otra que se forma a partir del fraccionamiento y la deslocalización de los procesos productivos, a lo cual corresponde la tendencia a la desintegración espacial y jurídica de la producción y la generalización de relaciones de subcontratación entre empresas, efectuándose la organización de la nueva industria sobre una base internacional. En los países industrializados este cambio tiene su origen, a partir de los años setentas, en el agotamiento técnico y social de la antigua base socio-técnica: el fordismo. En México y en otros países de América Latina sucede un fenómeno similar, aun cuando en ellos sólo se desarrollaron aspectos parciales del fordismo. Para abordar la problemática de la reestructuración productiva industrial en México se estudian, primero, las diversas vías de reestructuración emprendidas por los países y la polémica teórica que tal fenómeno ha suscitado, con el fin de ubicar el proceso en México dentro de ese contexto. Posteriormente se estudia el caso de México, relacionando los cambios en las bases socio-técnicas con los orígenes industriales de la nueva industria por fraccionamiento y deslocalización de los procesos productivos.
espero que te sirva
Para ello se retoma el concepto de base socio-técnica de la industria: la reestructuración productiva se concibe, entonces, como el cambio cualitativo de la misma, esto es, como un cambio tecnológico, de la organización del trabajo, de las relaciones laborales y del perfil de la fuerza de trabajo. Este cambio a nivel microeconómico tiene su expresión macro directa en el cambio en el proceso de industrialización, esto es, en el tránsito de una industria que se forma a partir de la substitución de importaciones y se organiza sobre una base nacional, a otra que se forma a partir del fraccionamiento y la deslocalización de los procesos productivos, a lo cual corresponde la tendencia a la desintegración espacial y jurídica de la producción y la generalización de relaciones de subcontratación entre empresas, efectuándose la organización de la nueva industria sobre una base internacional. En los países industrializados este cambio tiene su origen, a partir de los años setentas, en el agotamiento técnico y social de la antigua base socio-técnica: el fordismo. En México y en otros países de América Latina sucede un fenómeno similar, aun cuando en ellos sólo se desarrollaron aspectos parciales del fordismo. Para abordar la problemática de la reestructuración productiva industrial en México se estudian, primero, las diversas vías de reestructuración emprendidas por los países y la polémica teórica que tal fenómeno ha suscitado, con el fin de ubicar el proceso en México dentro de ese contexto. Posteriormente se estudia el caso de México, relacionando los cambios en las bases socio-técnicas con los orígenes industriales de la nueva industria por fraccionamiento y deslocalización de los procesos productivos.