El huecograbado es un sistema de impresión basado en la incisión de un diseño sobre una plancha metálica o cilindro que, más tarde, se rellenará con tinta para transmitir, mediante presión, la imagen al soporte. Este sistema se puede aplicar tanto a prensas manuales, como a rotativas.
Dicho sistemas de impresión se caracteriza por los siguientes elementos:
–Utilización de forma en hueco dura: se trata de un cilindro al que se adhiere la plancha metálica con las celdillas de diferentes hendiduras.
–Uso de una tinta líquida: se utilizada un tipo de tinta muy fluida que permite grandes transferencias y un rápido secado.
–Impreso sin tramar: permite la impresión de tonos con diferentes espesores de tinta, es decir, no es necesario utilizar tramas.
–Impresión en rotativas: la mayoría de las impresiones en huecograbado se llevan a cabo en máquinas de bobina.
Rotativa de huecograbado
Podemos diferenciar tres tipos de forma o hueco en función del tamaño y la profundidad:
a) Hueco convencional: en el que las celdillas tienen el mismo tamaño, pero diferente profundidad en función de la cantidad de tinta necesaria para la impresión.
b) Hueco autotípico: en este caso las celdillas muestran diferentes superficies o tamaños, pero igual profundidad.
c) Hueco semiautotípico: en este las celdillas son de distinta superficie o tamaño y también de distinta profundidad.
– Hueco electrónico: como en el semiautotípico, se trata de celdillas de diferente superficie y profundidad, con la particularidad de que se graba con procedimientos electrónicos.
A continuación se muestra la bobina cilíndrica, donde se acopla la placa metálica en la que están tallados los tipos y que está en contacto directo con la tinta. Al girar, pasa por una rasqueta que elimina los restos de tinta sobrantes.
El huecograbado es un sistema de impresión basado en la incisión de un diseño sobre una plancha metálica o cilindro que, más tarde, se rellenará con tinta para transmitir, mediante presión, la imagen al soporte. Este sistema se puede aplicar tanto a prensas manuales, como a rotativas.
Dicho sistemas de impresión se caracteriza por los siguientes elementos:
– Utilización de forma en hueco dura: se trata de un cilindro al que se adhiere la plancha metálica con las celdillas de diferentes hendiduras.
– Uso de una tinta líquida: se utilizada un tipo de tinta muy fluida que permite grandes transferencias y un rápido secado.
– Impreso sin tramar: permite la impresión de tonos con diferentes espesores de tinta, es decir, no es necesario utilizar tramas.
– Impresión en rotativas: la mayoría de las impresiones en huecograbado se llevan a cabo en máquinas de bobina.
Rotativa de huecograbado
Podemos diferenciar tres tipos de forma o hueco en función del tamaño y la profundidad:
a) Hueco convencional: en el que las celdillas tienen el mismo tamaño, pero diferente profundidad en función de la cantidad de tinta necesaria para la impresión.
b) Hueco autotípico: en este caso las celdillas muestran diferentes superficies o tamaños, pero igual profundidad.
c) Hueco semiautotípico: en este las celdillas son de distinta superficie o tamaño y también de distinta profundidad.
– Hueco electrónico: como en el semiautotípico, se trata de celdillas de diferente superficie y profundidad, con la particularidad de que se graba con procedimientos electrónicos.
A continuación se muestra la bobina cilíndrica, donde se acopla la placa metálica en la que están tallados los tipos y que está en contacto directo con la tinta. Al girar, pasa por una rasqueta que elimina los restos de tinta sobrantes.