-La transformación de la economía que se había iniciado en Inglaterra en el siglo XVIII proseguiría en Europa durante el XIX, tanto en la agricultura como en el comercio, la industria y el sistema financiero.
Sin embargo, a principios del siglo XIX era todavía impensable un desarrollo de tal magnitud, que conduciría al “gran capitalismo” y que haría que la producción industrial condicionara todos los factores, no sólo los de la vida económica, sino también los de la política y la sociedad.
El cambio se produjo en Europa entre 1830 y 1870, coincidiendo con las revoluciones burguesas y con el triunfo ideológico de esta nueva clase social.
La técnica, es decir, la ciencia aplicada a la economía, fue el factor decisivo en el proceso de industrialización. Hasta entonces el ser humano sólo había podido contar con las fuerzas de la naturaleza para la producción y el comercio : su propio ingenio y su fuerza, la del agua y la de los animales.
El desarrollo de las matemáticas y de las ciencias fisiconaturales permitió, tras el trabajo de laboratorio, su aplicación a principios prácticos. Así nació la máquina, que se convirtió en el instrumento básico de trabajo y casi llega a sustituir al ser humano.
Al mismo tiempo, se dominan nuevas fuentes de energía. Como el resultado de todo ello lo artificial venció a lo natural, la cantidad a la habilida
EL DESARROLLO INDUSTRIAL :
-La transformación de la economía que se había iniciado en Inglaterra en el siglo XVIII proseguiría en Europa durante el XIX, tanto en la agricultura como en el comercio, la industria y el sistema financiero.
Sin embargo, a principios del siglo XIX era todavía impensable un desarrollo de tal magnitud, que conduciría al “gran capitalismo” y que haría que la producción industrial condicionara todos los factores, no sólo los de la vida económica, sino también los de la política y la sociedad.
El cambio se produjo en Europa entre 1830 y 1870, coincidiendo con las revoluciones burguesas y con el triunfo ideológico de esta nueva clase social.
La técnica, es decir, la ciencia aplicada a la economía, fue el factor decisivo en el proceso de industrialización. Hasta entonces el ser humano sólo había podido contar con las fuerzas de la naturaleza para la producción y el comercio : su propio ingenio y su fuerza, la del agua y la de los animales.
El desarrollo de las matemáticas y de las ciencias fisiconaturales permitió, tras el trabajo de laboratorio, su aplicación a principios prácticos. Así nació la máquina, que se convirtió en el instrumento básico de trabajo y casi llega a sustituir al ser humano.
Al mismo tiempo, se dominan nuevas fuentes de energía. Como el resultado de todo ello lo artificial venció a lo natural, la cantidad a la habilida