Cocorí es un niño que habita en un pueblo donde tiene contacto con el mar, y a la vez con toda la naturaleza del bosque tropical. Cierto día, un barco se acerca al puerto, y Cocorí tiene la oportunidad de subir en él para conocer a sus tripulantes. Entre ellos, está una niña rubia. Con una curiosidad muy infantil, Cocorí se sorprende por el cabello de la niña, ya que nunca ha visto una como ella, y la niña piensa que la piel de Cocorí se ha llenado de hollín y por eso se ha oscurecido, pues nunca ha visto personas que no sean de tez blanca.
Comienzan a interactuar, y a Cocorí le parece que la niña es hermosa. Después de un rato, ella regala un beso y una rosa a Cocorí, y él le hace la promesa de traerle un mono tití. De esta forma, Cocorí deja la rosa en un vaso de agua, se aventura en la selva y logra atrapar a un monito Tití, pero cuando regresa a la playa para dárselo a la niña, descubre que el barco se ha marchado. Decepcionado, vuelve a su casa para descubrir que su rosa se ha marchitado. Entonces, surge en el alma del niño una pregunta: ¿Por qué la rosa vivió sólo un día? Animado por este dilema existencial, recorre la selva en busca de una respuesta. En medio de peligros y situaciones difíciles, consigue a quienes serán sus compañeros en esta travesía: Doña Modorra la Tortuga, y el monito Tití.
Tras enfrentarse a algunos peligros, y luego de varios días ausente, el niño y sus amigos regresan a su hogar sin haber logrado su propósito. Se encuentran entonces con el Negro Cantor, quien finalmente le da una respuesta, y feliz, Cocorí regresa a su casa para descubrir que, del tallo seco que había quedado de su rosa, su madre ha cultivado un rosal.
Cocorí es un niño que habita en un pueblo donde tiene contacto con el mar, y a la vez con toda la naturaleza del bosque tropical. Cierto día, un barco se acerca al puerto, y Cocorí tiene la oportunidad de subir en él para conocer a sus tripulantes. Entre ellos, está una niña rubia. Con una curiosidad muy infantil, Cocorí se sorprende por el cabello de la niña, ya que nunca ha visto una como ella, y la niña piensa que la piel de Cocorí se ha llenado de hollín y por eso se ha oscurecido, pues nunca ha visto personas que no sean de tez blanca.
Comienzan a interactuar, y a Cocorí le parece que la niña es hermosa. Después de un rato, ella regala un beso y una rosa a Cocorí, y él le hace la promesa de traerle un mono tití. De esta forma, Cocorí deja la rosa en un vaso de agua, se aventura en la selva y logra atrapar a un monito Tití, pero cuando regresa a la playa para dárselo a la niña, descubre que el barco se ha marchado. Decepcionado, vuelve a su casa para descubrir que su rosa se ha marchitado. Entonces, surge en el alma del niño una pregunta: ¿Por qué la rosa vivió sólo un día? Animado por este dilema existencial, recorre la selva en busca de una respuesta. En medio de peligros y situaciones difíciles, consigue a quienes serán sus compañeros en esta travesía: Doña Modorra la Tortuga, y el monito Tití.
Tras enfrentarse a algunos peligros, y luego de varios días ausente, el niño y sus amigos regresan a su hogar sin haber logrado su propósito. Se encuentran entonces con el Negro Cantor, quien finalmente le da una respuesta, y feliz, Cocorí regresa a su casa para descubrir que, del tallo seco que había quedado de su rosa, su madre ha cultivado un rosal.
Respuesta:
Cocorí es un niño que habita en un pueblo donde tiene contacto con el mar, y a la vez con toda la naturaleza del bosque tropical. Cierto día, un barco se acerca al puerto, y Cocorí tiene la oportunidad de subir en él para conocer a sus tripulantes. Entre ellos, está una niña rubia. Con una curiosidad muy infantil, Cocorí se sorprende por el cabello de la niña, ya que nunca ha visto una como ella, y la niña piensa que la piel de Cocorí se ha llenado de hollín y por eso se ha oscurecido, pues nunca ha visto personas que no sean de tez blanca.
Comienzan a interactuar, y a Cocorí le parece que la niña es hermosa. Después de un rato, ella regala un beso y una rosa a Cocorí, y él le hace la promesa de traerle un mono tití. De esta forma, Cocorí deja la rosa en un vaso de agua, se aventura en la selva y logra atrapar a un monito Tití, pero cuando regresa a la playa para dárselo a la niña, descubre que el barco se ha marchado. Decepcionado, vuelve a su casa para descubrir que su rosa se ha marchitado. Entonces, surge en el alma del niño una pregunta: ¿Por qué la rosa vivió sólo un día? Animado por este dilema existencial, recorre la selva en busca de una respuesta. En medio de peligros y situaciones difíciles, consigue a quienes serán sus compañeros en esta travesía: Doña Modorra la Tortuga, y el monito Tití.
Tras enfrentarse a algunos peligros, y luego de varios días ausente, el niño y sus amigos regresan a su hogar sin haber logrado su propósito. Se encuentran entonces con el Negro Cantor, quien finalmente le da una respuesta, y feliz, Cocorí regresa a su casa para descubrir que, del tallo seco que había quedado de su rosa, su madre ha cultivado un rosal.
Explicación:
Respuesta:
GRACIAS :D
Explicación:
Cocorí es un niño que habita en un pueblo donde tiene contacto con el mar, y a la vez con toda la naturaleza del bosque tropical. Cierto día, un barco se acerca al puerto, y Cocorí tiene la oportunidad de subir en él para conocer a sus tripulantes. Entre ellos, está una niña rubia. Con una curiosidad muy infantil, Cocorí se sorprende por el cabello de la niña, ya que nunca ha visto una como ella, y la niña piensa que la piel de Cocorí se ha llenado de hollín y por eso se ha oscurecido, pues nunca ha visto personas que no sean de tez blanca.
Comienzan a interactuar, y a Cocorí le parece que la niña es hermosa. Después de un rato, ella regala un beso y una rosa a Cocorí, y él le hace la promesa de traerle un mono tití. De esta forma, Cocorí deja la rosa en un vaso de agua, se aventura en la selva y logra atrapar a un monito Tití, pero cuando regresa a la playa para dárselo a la niña, descubre que el barco se ha marchado. Decepcionado, vuelve a su casa para descubrir que su rosa se ha marchitado. Entonces, surge en el alma del niño una pregunta: ¿Por qué la rosa vivió sólo un día? Animado por este dilema existencial, recorre la selva en busca de una respuesta. En medio de peligros y situaciones difíciles, consigue a quienes serán sus compañeros en esta travesía: Doña Modorra la Tortuga, y el monito Tití.
Tras enfrentarse a algunos peligros, y luego de varios días ausente, el niño y sus amigos regresan a su hogar sin haber logrado su propósito. Se encuentran entonces con el Negro Cantor, quien finalmente le da una respuesta, y feliz, Cocorí regresa a su casa para descubrir que, del tallo seco que había quedado de su rosa, su madre ha cultivado un rosal.