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La motricidad desempeña dos funciones en la relación al niño con su entorno, la adquisición demovimientos autónomos, establece una nueva relación del niño con el mundo que lo rodea. Una de estas funciones es que, a través de los movimientos expresivos hace posible la comunicación, por ejemplo las posturas y los gestos que acompañan a la comunicación verbal. Otra función es que permite los desplazamientos del propio cuerpo en el espacio y la manipulación de los objetos.Por ejemplo, poder tomar los objetos por sí mismo y desplazarse hasta lugares a los que antes sólo llegaba con la apoyo del adulto. Esto transforma sustancialmente su capacidad de actuar y transformar así su mundo, de esta forma modificará la vivencia de “sí mismo” e iniciará el camino hacia la autonomía. Una de las claves para la adquisición de los movimientos autónomos es la manera como los adultos toleran o aceptan la autonomía del niño. El aparato motor toma el valor de facilitar la asimilación y transformación del mundo espacial. Las acciones del niño es en el espacio le ayuda a vivenciar y experimentar su cuerpo. De esta forma va tomando conciencia de su cuerpo, como también de la ubicación en el espacio y desplazamiento de los objetos. Las nociones de lateralidad devienen de la ubicación de los objetos en relación a su cuerpo. Determinado estudios demuestran que “La percepción que el niño adquiere de su propio cuerpo posicionado en el espacio, actuando por sí mismo sobre los objetos e interactuando con los seres humanos, resulta un elemento constitutivo de la personalidad.”
Esto transforma sustancialmente su capacidad de actuar y transformar así su mundo, de esta forma modificará la vivencia de “sí mismo” e iniciará el camino hacia la autonomía. Una de las claves para la adquisición de los movimientos autónomos es la manera como los adultos toleran o aceptan la autonomía del niño. El aparato motor toma el valor de facilitar la asimilación y transformación del mundo espacial. Las acciones del niño es en el espacio le ayuda a vivenciar y experimentar su cuerpo. De esta forma va tomando conciencia de su cuerpo, como también de la ubicación en el espacio y desplazamiento de los objetos. Las nociones de lateralidad devienen de la ubicación de los objetos en relación a su cuerpo. Determinado estudios demuestran que “La percepción que el niño adquiere de su propio cuerpo posicionado en el espacio, actuando por sí mismo sobre los objetos e interactuando con los seres humanos, resulta un elemento constitutivo de la personalidad.”