El ultimátum del presidente italiano, Segio Mattarella, a los partidos aún no había dado frutos, pero ya parece haber acuerdo. Las consecuencias de una crisis gubernamental serían nefastas para el país.
Este martes, (27.08.2019), los partidos políticos en Roma tendrían que haberse reunido con el presidente de Italia, Sergio Mattarella, para informarlo sobre si veían oportunidades para formar un gobierno nuevo. Los actores principales tenían tiempo hasta este miércoles (28.9.2019) para eso. Ahora, el líder del Movimiento Cinco Estrellas, Luigi Di Maio, acaba de afirmar que "hay un acuerdo político con el Partido Demócrata (PD, centroizquierda)" para gobernar juntos Italia en un Ejecutivo encabezado por el primer ministro dimisionario, Giuseppe Conte.
La disputa se desencadenó en torno al actual primer ministro, Giuseppe Conte, quien, según el Movimiento 5 Eestrellas (M5E), debería seguir liderando el nuevo gobierno. Los socialdemócratas (PD) etaban estrictamente en contra.
Las alternativas eran obvias: o una nueva coalición econtraba el apoyo de la mayoría en el Parlamento actual, o se celebrarían nuevas elecciones. Mattarella quiere evitar elecciones anticipadas, y no solo porque las últimas elecciones generales en Italia tuvieron lugar el año pasado, sino también porque hay razones económicas de peso.
Todos los observadores coinciden en que, de haber elecciones anticipadas, el Parlamento actual ya no podrá decidir sobre el presupuesto para el próximo año. Y eso tendría consecuencias que podrían ser fatales para Italia. Las palabras claves son "aumento del IVA".
Durante años, una ley en Italia estipuló que el IVA debía incrementarse gradualmente año tras año, para contrarrestar la gigantesca deuda pública del país y mantener el agujero presupuestario crónico bajo control. El déficit estatal actualmente supera el 133 por ciento del rendimiento económico anual del país
¿IVA del 25 por ciento?
El aumento se produce automáticamente, según las leyes presupuestarias de años anteriores, a menos que las medidas de austeridad conduzcan a resultados similares. Pero sin eso, no hay medidas de austeridad. Sin presupuesto regulador, el IVA aumentaría el próximo año, en solo cuatro meses, del 22 al 25 por ciento.
Como resultado de dicho aumento, el diario "Corriere della Sera” predijo recientemente que una pareja italiana promedio con dos hijos, tendría 756 euros menos al año. El aumento del IVA, afirman los economistas, tendrá, sobre todo, un duro impacto en las familias menos pudientes y rápidamente en el consumo. Además, la economía italiana ya está cerca de la recesión.
En el segundo trimestre, la Oficina de Estadística italiana no informó de ningún crecimiento. Para este año, la Comisión de la UE estimó que Italia tendrá un crecimiento "marginal" del 0,1 por ciento; el año próximo del un 0,7 por ciento, pero este pronóstico se realizó antes de la crisis política actual.
Silvio Berlusconi fue quien introdujo la medida del IVA en 2012, porque la UE reclamó entonces a Italia que ahorrara 20 mil millones de euros para equilibrar su presupuesto.
Promesas de Salvini
Una vez más, se trata de otro reclamo de la UE, que generalmente han sido respetados por los gobiernos anteriores en Roma. El hombre fuerte de la derecha italiana, del partido Liga Norte, Matteo Salvini, quiere hacer oídos sordos a lo que dicta Bruselas y ya anunció un programa de gastos de 50 mil millones de euros si se hiciese cargo de gobernar el país, y además sin IVA.
Esto no es solo una clara señal de desafío hacia Bruselas, sino también podría ser un desastre para su propio país. "El aumento del IVA es simplemente un aumento de impuestos", dijo la asociación comercial Confcommercio. "La crisis de gobierno en un momento de crecimiento cero y, dada una ley de presupuesto potencialmente insegura, es un obstáculo para la inversión y el consumo", señaló el jefe de la asociación, Carlo Sangalli.
También se espera poco apoyo a Italia por parte de sus vecinos europeos: la crisis italiana "se encuentra en una fase crítica para Europa, con el peligro de una recesión en Alemania, la creación de una nueva Comisión en Bruselas y podría conducir a un deterioro significativo de la confianza en la eurozona", dijo el jefe economista de la organización de empresarios italiana Confindustria, Andrea
El ultimátum del presidente italiano, Segio Mattarella, a los partidos aún no había dado frutos, pero ya parece haber acuerdo. Las consecuencias de una crisis gubernamental serían nefastas para el país.
Este martes, (27.08.2019), los partidos políticos en Roma tendrían que haberse reunido con el presidente de Italia, Sergio Mattarella, para informarlo sobre si veían oportunidades para formar un gobierno nuevo. Los actores principales tenían tiempo hasta este miércoles (28.9.2019) para eso. Ahora, el líder del Movimiento Cinco Estrellas, Luigi Di Maio, acaba de afirmar que "hay un acuerdo político con el Partido Demócrata (PD, centroizquierda)" para gobernar juntos Italia en un Ejecutivo encabezado por el primer ministro dimisionario, Giuseppe Conte.
La disputa se desencadenó en torno al actual primer ministro, Giuseppe Conte, quien, según el Movimiento 5 Eestrellas (M5E), debería seguir liderando el nuevo gobierno. Los socialdemócratas (PD) etaban estrictamente en contra.
Las alternativas eran obvias: o una nueva coalición econtraba el apoyo de la mayoría en el Parlamento actual, o se celebrarían nuevas elecciones. Mattarella quiere evitar elecciones anticipadas, y no solo porque las últimas elecciones generales en Italia tuvieron lugar el año pasado, sino también porque hay razones económicas de peso.
Todos los observadores coinciden en que, de haber elecciones anticipadas, el Parlamento actual ya no podrá decidir sobre el presupuesto para el próximo año. Y eso tendría consecuencias que podrían ser fatales para Italia. Las palabras claves son "aumento del IVA".
Durante años, una ley en Italia estipuló que el IVA debía incrementarse gradualmente año tras año, para contrarrestar la gigantesca deuda pública del país y mantener el agujero presupuestario crónico bajo control. El déficit estatal actualmente supera el 133 por ciento del rendimiento económico anual del país
¿IVA del 25 por ciento?
El aumento se produce automáticamente, según las leyes presupuestarias de años anteriores, a menos que las medidas de austeridad conduzcan a resultados similares. Pero sin eso, no hay medidas de austeridad. Sin presupuesto regulador, el IVA aumentaría el próximo año, en solo cuatro meses, del 22 al 25 por ciento.
Como resultado de dicho aumento, el diario "Corriere della Sera” predijo recientemente que una pareja italiana promedio con dos hijos, tendría 756 euros menos al año. El aumento del IVA, afirman los economistas, tendrá, sobre todo, un duro impacto en las familias menos pudientes y rápidamente en el consumo. Además, la economía italiana ya está cerca de la recesión.
En el segundo trimestre, la Oficina de Estadística italiana no informó de ningún crecimiento. Para este año, la Comisión de la UE estimó que Italia tendrá un crecimiento "marginal" del 0,1 por ciento; el año próximo del un 0,7 por ciento, pero este pronóstico se realizó antes de la crisis política actual.
Silvio Berlusconi fue quien introdujo la medida del IVA en 2012, porque la UE reclamó entonces a Italia que ahorrara 20 mil millones de euros para equilibrar su presupuesto.
Promesas de Salvini
Una vez más, se trata de otro reclamo de la UE, que generalmente han sido respetados por los gobiernos anteriores en Roma. El hombre fuerte de la derecha italiana, del partido Liga Norte, Matteo Salvini, quiere hacer oídos sordos a lo que dicta Bruselas y ya anunció un programa de gastos de 50 mil millones de euros si se hiciese cargo de gobernar el país, y además sin IVA.
Esto no es solo una clara señal de desafío hacia Bruselas, sino también podría ser un desastre para su propio país. "El aumento del IVA es simplemente un aumento de impuestos", dijo la asociación comercial Confcommercio. "La crisis de gobierno en un momento de crecimiento cero y, dada una ley de presupuesto potencialmente insegura, es un obstáculo para la inversión y el consumo", señaló el jefe de la asociación, Carlo Sangalli.
También se espera poco apoyo a Italia por parte de sus vecinos europeos: la crisis italiana "se encuentra en una fase crítica para Europa, con el peligro de una recesión en Alemania, la creación de una nueva Comisión en Bruselas y podría conducir a un deterioro significativo de la confianza en la eurozona", dijo el jefe economista de la organización de empresarios italiana Confindustria, Andrea