Hay especialistas que consideran que en verdad el deseo sexual tiene que ver con el hecho mismo de ser humanos, puesto que estos estarían ‘programados’ para tener sexo, del mismo modo en que lo están para comer. Otra teoría, igualmente vinculada a la idea de la evolución, afirma que el deseo sexual tiene que ver con una necesidad biológica y que es necesario para preservar la especie.
Los enfoques más culturales, en cambio, se centran en los aspectos individuales que motivan a las personas a hacer o no el amor. Por ejemplo, psicólogos de la Universidad de Texas en EE.UU., les preguntaron a más de 1.500 estudiantes universitarios sobre sus actitudes y experiencias sexuales y dividieron las respuestas en cuatro grupos principales: Primero, por cuestiones físicas como placer, disminución del estrés, ejercicio, curiosidad sexual o atracción a la otra persona. Segundo, por cumplir algún objetivo, como tener hijos, volverse más popular o incluso buscar venganza. Tercero, por cuestiones emocionales, como amor, compromiso o gratitud. Y por último por aspectos que tienen que ver con la personalidad, como mejorar la autoestima, evitar que él o la compañera busquen sexo en otra parte o sentirse presionados para tener sexo.
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XgrChris
Paro complacerse o tener hijos con sexo o xxx
El hecho
Hay especialistas que consideran que en verdad el deseo sexual tiene que ver con el hecho mismo de ser humanos, puesto que estos estarían ‘programados’ para tener sexo, del mismo modo en que lo están para comer. Otra teoría, igualmente vinculada a la idea de la evolución, afirma que el deseo sexual tiene que ver con una necesidad biológica y que es necesario para preservar la especie.
Los enfoques más culturales, en cambio, se centran en los aspectos individuales que motivan a las personas a hacer o no el amor. Por ejemplo, psicólogos de la Universidad de Texas en EE.UU., les preguntaron a más de 1.500 estudiantes universitarios sobre sus actitudes y experiencias sexuales y dividieron las respuestas en cuatro grupos principales: Primero, por cuestiones físicas como placer, disminución del estrés, ejercicio, curiosidad sexual o atracción a la otra persona. Segundo, por cumplir algún objetivo, como tener hijos, volverse más popular o incluso buscar venganza. Tercero, por cuestiones emocionales, como amor, compromiso o gratitud. Y por último por aspectos que tienen que ver con la personalidad, como mejorar la autoestima, evitar que él o la compañera busquen sexo en otra parte o sentirse presionados para tener sexo.